El Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio ha hecho público un comunicado en el que explica los motivos por los que se ha visto obligado a incrementar una serie de tributos municipales. Según se especifica, esta subida de impuestos (IBI, IVTM y IVTNU) es consecuencia de los planes de ajuste firmados por el PSOE en los años 2016, 2017, 2019, 2020, 2021 y 2023.

Aquellos planes de ajuste, sostienen desde el actual Gobierno local, fueron reiteradamente incumplidos, lo que se tradujo en que la deuda con el Ministerio de Hacienda fue creciendo año tras año provocando una delicada situación.

Es por eso, siempre según su versión, que ahora han tenido que acatar las exigencias del Ministerio para devolver la deuda heredada. «Se han tenido que adoptar medidas que no nos hubiera gustado tener que acatar», reconocen, si bien por otra parte destacan que se ha conseguido evitar que todos los tributos se incrementaran al máximo legal establecido «gracias a la adopción de medidas de ahorro y una gestión responsable».

Desde el Ejecutivo moralejeño indican que el primer impuesto afectado por esta subida, obligada por las circunstancias, es el IBI, cuyo incremento es del 50% con respecto al importe abonado en el anterior ejercicio.

PAGO FRACCIONADO

Para tratar de paliar en alguna medida esta considerable subida, dos ordenanzas municipales aprobadas en Pleno a finales del pasado mes de mayo permiten a los vecinos acogerse a un fraccionamiento del pago de impuestos, procediendo a poner a cobro el recibo del IBI en dos veces y ampliando, entre otros, el plazo de 12 a 24 meses en grandes deudas para beneficiar a los contribuyentes con una situación económica más precaria.

Desde el Ayuntamiento se destaca, por último, el esfuerzo que se está realizando para saldar la deuda contraída y se recuerda que a finales del pasado año se procedió a realizar un primer pago a Hacienda por importe de 217.660 euros. El plan de pagos programado estipula que en 2050 podría quedar completamente saldada la deuda municipal.