El Getafe superó este miércoles al Celta en lo que supuso su primer triunfo tras el regreso de José Bordalás al banquillo del Coliseum. La primera victoria del conjunto azulón después de siete partidos se fraguó gracias a un tempranero penalti de Fran Beltrán sobre Enes Unal que el propio delantero turco convirtió en el único gol del encuentro (1-9.
Con estos tres puntos, el Getafe suma 34 y alcanza en la tabla al Valencia, equipo que marca a día de hoy la frontera de la salvación y que este miércoles empató en casa frente al Villarreal (1-1).
Bordalás, que volvía la que fue su casa entre 2016 y 2021, introdujo varias novedades significativas en el once, llamando especialmente la atención la vuelta de Arambarri tras un periodo de lesión y las titularidades de Jaime Mata y Stefan Mitrovic, que llevaban mucho tiempo alejados de una alineación inicial.
El Celta, por su parte, acabó con 10 por la expulsión de Aidoo en el minuto 77 y desesperado, con Carlos Carvalhal reclamando al colegiado las pérdidas de tiempo de los locales, aunque lo realidad es que los vigueses no generaron una sola ocasión de gol ante David Soria a lo largo y ancho del encuentro.
INTENSIDAD Y CONTUNDENCIA ATRÁS
Y es que la intensidad y contundencia del Getafe a la hora de defender su renta sacaron de quicio al Celta, tremendamente limitado a nivel ofensivo y que no mejoró ni siquiera con un cambio de esquema. Este vez ni siquiera le dio fruto el juego directo con la incorporación de Paciencia, que otras veces sí dio resultado.
A un cuarto de hora del final llegó la segunda amarilla de Aidoo y ya en los minutos finales el Getafe perdonó hasta tres clarísimas ocasiones para sentenciar, dos de ellas de Munir y la tercera de Unal, aunque le bastó con su exigente desempeño defensivo para mantener a buen recaudo tres puntos que se antojaban absolutamente vitales en la lucha por la permanencia.
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