Acción del partido entre el Almería y el Getafe (foto: Getafe CF)

El Getafe no aprovechó su visita de este miércoles a Almería para despejar las dudas en torno a su estado de forma. Todo lo contrario. Las multiplicó porque volvió a cuajar otro partido pésimo frente a un rival directo a día de hoy por mantener la categoría.

Una vez más, el colectivo azulón lo fio casi todo a mantener su portería a buen recaudo, pero sus planes se torcieron de manera irremediable cuando Leo Baptistao remató de cabeza en el primer palo un saque de esquina de Embarba y superó la débil oposición de David Soria (26′).

El Getafe, que hasta entonces apenas había pasado apuros, pero que tampoco había creado el más mínimo sobresalto en el área local, se le indigestó verse por detrás en el marcador y apenas mostró capacidad de reacción antes del descanso.

Tras la pausa, Quique fue poniendo sobre el césped todo el arsenal ofensivo de que disponía y a la presencia inicial de Unal y Mayoral se unió la de Munir y Latasa, pero semejante proliferación de arietes tampoco le dio para generar las ocasiones que pretendía y que solo llegaron en el tramo final, cuando ya el rival estaba en inferioridad numérica por expulsión de Ely (87′).

LA REACCIÓN LLEGÓ MUY TARDE

Unal, desasistido durante la práctica totalidad del encuentro, logró marcar en el 89′, pero el gol fue anulado por clara posición de fuera de juego. Y ya en pleno arreón final (93′), Juan Iglesias remataba a la parte exterior del poste en la única ocasión clara del conjunto azulón en todo el partido. Demasiado poco a día de hoy como para aspirar a otra cosa que no sea luchar por eludir el descenso.

Y es que, numeros en mano, desde que enlazó un doble triunfo ante Real Sociedad y Osasuna, el Getafe solo ha sumado una victoria más en los ocho siguientes compromisos, de los que ha perdido tres y ha empatado cuatro, lo que se traduce en un adverso balance de 7 puntos sumados sobre 24 posibles.