Formación inicial del Getafe ante el Atlético Baleares (foto: Getafe CF)

Estaba claro que la presente edición de la Copa no era prioritaria para el Getafe, metido como anda en la lucha por la supervivencia en Primera. Pero una cosa es que ocupase un lugar secundario en sus planes y otra bien distinta es firmar un partido tan bochornoso como el de este jueves ante el Atlético Baleares, un rival de Primera RFEF -dos categorías por debajo- que le ha propinado al colectivo azulón un correctivo de los que hacen época (5-0).

Lo peor no ha sido quedar apeado de una competición con tanto significado para el ‘Geta’ en la segunda ronda, algo que no era del todo descabellado teniendo en cuenta las circunstancias, sino hacerlo de una manera tan torticera y tirando por la borda el crédito que siempre se le debe suponer a un contendiente de su enjundia.

El repaso de los baleares ha sido, además, completo. Desde el pitido inicial hasta la conclusión. No ha habido un solo momento en el que el remozado Getafe haya dado señales de vida. Y cuando ha intentado darlas ha sido para mal.

Apenas se habían rebasado los cinco primeros minutos cuando Orfila adelantaba a los locales tras una mala salida de Yáñez, uno de los muchos señalados en este encuentro, y a partir de ahí todo ha sido casi coser y cantar para un equipo que quería frente a otro que no podía, o no sabía.

Con todo, a la media hora de juego la eliminatoria seguía abierta por lo ajustado del marcador, pero un intempestivo cabezazo de Cabaco a Isi Ros ha desembocado en la expulsión del uruguayo y ha finiquitado las opciones del Getafe, que han terminado de irse por el sumidero a la que Orfila ha superado por segunda vez a Yáñez al filo del descanso.

El asunto daba sensación de no tener remedio ya para los de Quique, que en la víspera confiaba en que alguno de los titulares en este compromiso le ofreciera argumentos para serlo también en Liga, y ha terminado de torcerse en el 67′, cuando Dioni cabeceaba a la red un buen centro de Canario.

En pleno naufragio de la nave azulona, el conjunto balear aún ha tenido arrestos para enviarle otros dos torpedos a la línea de flotación para terminar de hundirla. Manel ha aprovechado el enésimo desajuste de la zaga visitante para firmar el cuarto (71′) y José Fran ha redondeado la manita con el quinto en el 89′ entre la algarabía de una hinchada que no acababa de dar crédito a lo que veía en una noche para el recuerdo.

QUIQUE: «ESTO ES INACEPTABLE»

Al término del encuentro, Quique no ponía paños calientes al desastre que acababa de acontecer. «No hemos comparecido y lo lamentamos enormemente. No hay excusas. Pedimos perdón a los aficionados porque esto es inaceptable», ha señalado el técnico madrileño antes de comentar que «lo de Cabaco lo trataremos dentro del vestuario»