Alfonso Rueda depositando su voto (foto: PP de Galicia)

Con el 99,93% de los votos escrutados, el Partido Popular ha vuelto a proclamarse ganador de las elecciones autonómicas celebradas este domingo en Galicia y conservará su mayoría absoluta de mano de Alfonso Rueda, lo que de paso supone un considerable refuerzo para Núñez Feijóo, que se había volcado en esta campaña a sabiendas de lo mucho que había en juego.

Los populares han obtenido 40 escaños, dos menos que en los anteriores comicios autonómicos, pero más que suficientes para seguir gobernando en solitario, ya que la mayoría absoluta está cifrada en 38.

La otra formación que ha salido bien librada en estas elecciones ha sido el BNG. Los nacionalistas han crecido en cinco escaños hasta alcanzar los 25, pero su crecimiento ha sido exclusivamente a costa del PSOE, que ha obtenido los peores resultados de su historia y ni siquiera ha alcanzado los diez escaños (9).

Los resultados también han resultado nefastos tanto para Sumar como para Podemos, que se han quedado sin representación al no llegar siquiera al cinco por ciento de los sufragios, algo que también ha ocurrido con VOX. Por contra, Democracia Ourensana entra por vez primera en el parlamento de Galicia al obtener un escaño que, en cualquier caso, no le servirá para ser llave de gobierno.

UNA SUERTE DE PLEBISCITO

Resultados de las elecciones gallegas con el 99,93% escrutado
Estas elecciones gallegas, que se planteaban como una suerte de plebiscito a nivel nacional, han consumado el desastre del modelo pretendido por Pedro Sánchez y sus socios de Gobierno para Galicia.

Lejos de consumar el vuelco que venían anunciando las fuerzas de izquierda -con la inestimable colaboración del CIS- el Partido Popular ha mantenido su hegemonía abriendo otra enorme vía de agua en el PSOE, que se echó en brazos del BNG como única vía para desbancar a los populares y ha sufrido una auténtica hecatombe cuyos efectos habrá que calibrar en los próximos días.

Lo que parece claro, al margen de la fallida estrategia preelectoral, es que el asunto de la amnistía ha tenido también una efectos tremendamente adversos para Sánchez y sus socios de Gobierno, que también han sido severamente penalizados en Galicia.