El Getafe está viviendo un arranque de curso en el que todo lo que le puede ir mal, le va todavía mucho peor. Y buena muestra de ello es lo que le aconteció este sábado en Vallecas frente a un Rayo que supo hurgar a conciencia en la herida azulona y acabó imponiéndose por 3-0 ante el delirio de su hinchada.
Números en mano, el Getafe cierra la quinta jornada con cero puntos en su casillero, un gol a favor y 8 en contra. Una demoledora estadística que, como suele suceder en estos casos y por muy prematuro que parezca, deja a Míchel tremendamente tocado, más que nada porque la buena imagen ofrecida en los tres primeros compromisos frente a Valencia, Sevilla y Barcelona se ha difuminado ante dos rivales teóricamente más asequibles como Elche y Rayo.
LESIÓN DE JANKTO
Un remate a la madera de Unal al minuto de juego fue el presagio de que la adversidad volvería a cebarse con el Getafe. A los diez, un penalti en contra señalado a Djene era convertido por Trejo en el 1-0. Y al cuarto de hora Jankto caía lesionado y podría tener afectados la tibia y el peroné de su pierna izquierda. Difícil superar tantas malas noticias en tan poco tiempo.
Pero también las hubo en el tramo final del encuentro, cuando los de azul todavía estaban en condiciones de nivelar el encuentro. Primero, Ciss resolvía de cabeza un córner (77′) y apenas tres minutos después filtraba un magnífico pase para que Falcao estableciera el 3-0 definitivo. Y es que ni siquiera de penalti fue capaz de marcar el Getafe, ya que en el 85′ Dimitrievski realizó una excelente intervención al lanzamiento de Unal.
Derrota, pues, de las que hacen ‘pupa’, pero el Getafe tendrá poco tiempo para lamerse las heridas, ya que este martes recibe en el Coliseum al Atlético de Madrid, que tampoco está para concesiones tras su empate en casa ante el Athletic. Panorama peliagudo el que se le presenta al colectivo azulón cuando esto apenas acaba de empezar.
