El Club Voleibol Leganés está trabajando de lleno en la configuración del nuevo proyecto de sus dos equipos senior, que volverán a competir la próxima temporada en Superliga 2 tras quedarse ambos a un paso de ascender a la máxima categoría en el curso recién finalizado.
El objetivo de cara al ejercicio que viene no es otro que dotar a las plantillas de ambos equipos del potencial necesario como para luchar de nuevo por el ascenso a Superliga con ciertas garantías de éxito. Y para empezar, el primer movimiento de la entidad consistió concretar la renovación de los dos entrenadores, Álvaro Tejero e Ilde García, al frente de una y otra escuadra.
Además, el club ha conseguido cerrar en las últimas horas el fichaje de Rolando Hernández, internacional olímpico con Venezuela en la modalidad de voley playa, y que jugó la última media temporada en las filas del CV Sant Pere y Sant Pau de Tarragona, con el que se proclamó mejor receptor de la fase de ascenso. De hecho, completó un gran partido en el duelo frente al Voleibol Leganés liderando el triunfo de su equipo.
Un refuerzo de auténtico postín para el primer equipo masculino, que por lo pronto también tiene asegurada la continuidad de los dos colocadores de esta pasada campaña, Felipe de Mello y Bruno Vos.
INÉS VILLA Y NAZARET FLORIÁN NO CONTINÚAN
Más cambios se avecinan en el caso del colectivo femenino, que cuenta con las bajas seguras de Inés Villa, que jugará en Superliga, y Nazaret Florián, que se volcará en el voley playa. Especialmente importante es la baja de Inés, jugadora formada en el club y que ostentaba la condición de capitana.
Para cubrir tan sensible marcha, el Voleibol Leganés tiene muy avanzada la contratación de una receptora internacional venezolana de contrastada categoría y que ha militado en varios equipos de la máxima categoría, lo que avala su casi segura incorporación.
Al igual que ocurre en el equipo masculino, también en este caso se ha conseguido renovar a las dos colocadoras del ejercicio anterior, en este caso Lúa Bovio y Andrea Sancha, cuya continuidad era sin duda prioritaria.
