Las terrazas de algunos bares de Valdemoro están causando serios perjuicios a los vecinos de determinadas calles, tanto porque ocupan plazas de aparcamiento como por los ruidos que provocan
En apenas cinco años de vigencia la ‘Ordenanza Municipal de Terrazas y Veladores’ de Valdemoro se ha quedado obsoleta. Porque basta con que un particular pague la tasa correspondiente para disponer en régimen de exclusividad de un tramo de vía pública en detrimento de los vecinos que también han pagado sus impuestos.
Esos vecinos no pueden disfrutar de ese mismo espacio, que queda privatizado con autorización municipal, ni de las plazas de aparcamiento que desaparecen. Así ocurre en vías como la Avenida de España, la calles Parla o Guardia Civil, donde las plazas de estacionamiento no sobran precisamente y donde se está privando a los vecinos de un espacio muy precioso para su calidad de vida.
El último ejemplo lo podemos encontrar en la calle Gödollo donde una de cada cuatro plazas de aparcamiento ha sido ‘okupada’ por las terrazas.
DOS TERRAZAS PRÁCTICAMENTE UNIDAS
La calle Gödollo, próxima al Paseo de la Estación, está en una zona en la que la escasez de plazas de aparcamiento supone un serio problema para los vecinos del barrio; esta situación se ve ahora agravada por la instalación de una terraza-velador que ocupa varias plazas de aparcamiento en la vía pública, situándose prácticamente frente a otra terraza que también se ha emplazado ocupando varias plazas de aparcamiento.
Nadie pregunta a los ciudadanos su opinión por la supresión de plazas de aparcamiento o si desean tener bajo sus ventanas una actividad que puede ser molesta y desagradable hasta la una y media de la madrugada. Sin embargo, la Ordenanza Municipal de Terrazas y Veladores de Valdemoro incumple este requisito legal pese haberse aprobado con posterioridad a la LPAC (abril de 2018).
Nadie pregunta a los vecinos su opinión por la supresión de plazas de aparcamiento
Como consecuencia la terraza que se está instalando en la calle Gödollo y en otras zonas de Valdemoro pueden estar en una situación al menos de alegalidad, según aseguran desde la Asociación de Consumidores y Usuarios de Valdemoro (ACUSVAL), “al no contar con el requisito previo de audiencia a los vecinos”.
Por ello solicita al Ayuntamiento “la paralización de la nueva terraza y la actualización de la normativa municipal para que todo aprovechamiento del espacio público cuente con la participación de los vecinos”.
Valdemoro debería tomar ejemplo de lo que le ha ocurrido al Ayuntamiento de Madrid. En la capital, una sentencia de Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha anulado la Ordenanza de terrazas por la “omisión de aspectos esenciales” en el procedimiento de elaboración de la modificación de la ordenanza “que afectan directamente al principio de buena administración”.
En concreto, el TSJM estima que la decisión de modificar la norma se adoptó “sin que se prevea en el procedimiento otorgar ningún trámite de audiencia a interesados” y sin la “existencia de un trámite de información pública”.
Hasta el momento el gobierno de David Conde se ha caracterizado por mantener una escucha activa con los vecinos y es de esperar que en asuntos como éste, el diálogo sirva para evitar problemas y encontrar soluciones razonables.
En cualquier caso, la legítima actividad de la hostelería no debería entrar en conflicto con el derecho a la movilidad de los vecinos, a su descanso y a desenvolverse en un entorno pacífico y amigable.
