La Comunidad de Madrid va a poner en marcha a partir de enero de 2020 un proyecto piloto para que las mujeres y los menores que viajan en los autobuses nocturnos puedan solicitar bajarse fuera de las paradas habituales. El objetivo es acortar su recorrido «y por tanto proporcionarles una mayor seguridad».

Así lo avanzaba el consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido en una entrevista con Europa Press. Además adelantaba que esta medida se pondrá en marcha en Fuenlabrada, Leganés, Pinto, Valdemoro y Las Rozas, «como prueba piloto durante unos meses».

«Solamente se requerirá que la persona lo solicite al conductor una parada antes de llegar a su destino; que se sitúe en la zona de la puerta delantera, porque descenderá por esta puerta, y que las paradas sean, lógicamente, en tramo urbano, para poder encontrar un sitio seguro para poder detener el vehículo», explicaba Garrido.

A este respecto, aseveraba que «son claramente mayores víctimas de la violencia las mujeres y también los niños, no los hombres». Y en este sentido, «lo que pretendemos es que tanto las mujeres como los menores que viajen en nuestros autobuses nocturnos de toda la red de transporte público de la Comunidad puedan solicitar la parada a demanda fuera de las que ya están previstas».

Para ello, en enero, previsiblemente después de las fiestas navideñas, se pondrá en marcha esta experiencia piloto en algunos municipios para ver «cuál es la mecánica más adecuada para que sea utilizada». Y a partir de ahí, en función de cómo resulte el servicio en estos municipios, se extenderá a otras localidades de la región.