La relación del Gobierno de Leganés con la Policía Local está prácticamente rota, en un punto de no retorno que en nada beneficia a la ciudad. El último episodio del conflicto se vivió a principios de este mes, cuando tras una reunión entre ambas instituciones, miembros del Ejecutivo denunciaron ser víctimas de un intento de “ataque” y “agresión” por parte de los representantes policiales.

La concejala de Recursos Humanos, Laura Oliva, el concejal de Seguridad Ciudadana, Óscar Oliveira y el director de Relaciones Laborales del Ayuntamiento de Leganés, Gregorio Ramírez, que participaban en representación del Gobierno, interpusieron denuncia ante la Policía Nacional por este altercado.

“Este Gobierno no va a aceptar las demandas de incremento salarial”, señalaba el alcalde

“Agentes de Policía Local fuera de servicio han entrado a la fuerza en las dependencias de la Casa del Reloj, han accedido hasta el lugar que ocupa la Delegación de Recursos Humanos y han ocasionado numerosos destrozos. Los agentes han golpeado los cristales del espacio donde se celebraba la reunión provocando momentos de mucha tensión durante los cuales los asistentes se han sentido amenazados. Después, los agentes han bajado a la calle desde donde han lanzado huevos que han impactado en las cristaleras de la Casa del Reloj”, exponían en su denuncia.

Sobre este asunto, el alcalde, Santiago Llorente, decía que “este Gobierno no va a aceptar las demandas de incremento salarial que piden los agentes”.

LOS POLICÍAS SE DEFIENDEN

Por su parte, las secciones sindicales de CPPM y UPM en la Policía Local de Leganés negaban estas acusaciones vertidas contra ellos. “Sufrimos la enésima humillación desde el Equipo de Gobierno que lidera el señor Santiago Llorente. Ha sido en forma de mentiras y calumnias, con el único propósito de desviar la atención por su nefasta gestión y desprestigiar a la plantilla”, exponían.

Faltan 90 agentes en la plantilla y hay goteras en la Comisaría, denuncian los sindicatos policiales

Así relataban que “fuimos citados a una reunión, para comunicarnos una bajada salarial de uno de los conceptos retributivos que componen la nómina de todos los policías, es decir, nada más lejos de lo manifestado por el alcalde. Como no podía ser de otra manera, las cinco secciones sindicales presentes nos opusimos”, insistiendo en que no piden un aumento de sueldo.

GOTERAS EN COMISARÍA

Lo que sí reclaman los agentes de Leganés son mejoras en el material y efectivos humanos, alertando que la plantilla ha perdido hasta la fecha 90 policías locales, entre traslados a otras ciudades y jubilaciones.

Además, días después de la reunión y antes de las Fiestas de San Nicasio, los representantes policiales denunciaban que, aparte de una bajada de sueldo unilateral por parte del Gobierno, se les obligaba a trabajar en días de libranza.

Y, finalmente, este 13 de octubre, los policías alertaban de goteras en la Comisaría de Policía Local, como ejemplo del “abandono de estas instalaciones”.