El Hospital Severo Ochoa de Leganés es uno de los seis hospitales públicos de Madrid, que se han sumado al sistema que permite mantener videoconsultas con los pacientes a través de la Tarjeta Sanitaria Virtual.

De este modo, el proyecto que arrancó en los hospitales del Henares y en el Escorial y sumó poco después a La Princesa y al Infanta Cristina tendrá ahora como nuevas incorporaciones a La Paz, Infanta Sofía, del Sureste, del Tajo, Móstoles y al Severo Ochoa.

Se espera que esté implantada en todos los centros hospitalarios públicos madrileños en el segundo semestre de este año

La nueva modalidad de acceso a través de la Tarjeta Sanitaria Virtual, pionera en España, permite que los profesionales sanitarios del Servicio Madrileño de Salud (Sermas) realicen estas consultas telemáticas sin que el paciente tenga que desplazarse al centro sanitario.

La aplicación garantiza la seguridad del acceso, la continuidad asistencial y se integra en la historia clínica, permitiendo al paciente el acceso a toda la información del proceso, las pruebas clínicas y la prescripción en receta electrónica. Esta atención por videollamada, que se suma a la presencial y telefónica, estará implantada en todos los centros públicos madrileños en el segundo semestre de este año.

IMPLANTACIÓN EN ATENCIÓN PRIMARIA

Por otra parte, se encuentra en proceso de validación de los protocolos necesarios para que los centros de Atención Primaria puedan ofrecer videoconsultas a partir del mes de abril. Este tipo de atención no presencial se podrá concertar con los centros sanitarios públicos (médicos, enfermeros, matronas, fisioterapeutas, profesionales de salud mental o trabajadores sociales) a través de la Tarjeta Sanitaria Virtual, que ya tienen descargada más de 2,8 millones de madrileños.

Si resulta indicada por el profesional, aparece de forma automática en la tarjeta virtual del paciente y en el equipo del trabajador sanitario. La videollamada se inicia cuando la herramienta informática detecta, en el día y la hora de la cita, que paciente y sanitario están preparados. Para poder acceder a ella no es necesaria la instalación de ninguna otra aplicación distinta a la Tarjeta Sanitaria Virtual, que también se encarga de notificar la consulta y enviar un recordatorio poco antes de mantenerla.

La nueva aplicación está integrada en la historia clínica del paciente, no puede ser grabada y no se produce ninguna transferencia de datos, pudiéndose recetar o solicitar pruebas como si se tratara de una consulta presencial, pero evitando tener que desplazarse al centro sanitario.