Nadie en su sano juicio hubiera imaginado que aquel modestísimo equipo creado en 1997 por Alfonso Catalina bajo la denominación de Agrupación Deportiva Segre -tomando el nombre de esta calle del barrio de Ondarreta- sería el germen de lo que dos décadas después se ha convertido en la más prolífica cantera del fútbol sala femenino a nivel continental.

Aquel equipo originario pasó a llamarse un año después Fútbol Sala Femenino Alcorcón y sirvió de preámbulo para la puesta en marcha de una liga interna en la ciudad, que en sus orígenes estaba integrada en su totalidad por conjuntos del FSF Alcorcón. El crecimiento de aquel primer proyecto ha sido tan exponencial que a día de hoy el AD Alcorcón FSF -nomenclatura actual tras el acuerdo alcanzado con el AD Alcorcón de fútbol- presume de ser el club referente a nivel de base del fútbol sala femenino europeo tanto en cantidad como en calidad.

Lo es en cifras porque en este curso forman parte de su estructura más de 200 jugadoras repartidas entre sus 13 equipos federados: un chupete, un benjamín, dos alevines, dos un infantiles, un cadete, un juvenil, un senior D (2ª regional), un senior C (1ª regional), un senior B (2ª división) y un senior (1ª división).

A esto habría que añadir dos equipos de escuela que no compiten, así como un equipo universitario de fútbol sala y otro de fútbol-7. Y todo ello sin olvidar los cuatro equipos con que cuenta en otros tantos colegios de la ciudad y que juegan una liga entre ellos.

Pero es que también sobresale en lo que respecta a la cualificación de sus planteles. Buena prueba de ello es que cinco de los colectivos amarillos lideran otras tantas de las categorías en que compiten. Ejemplo palmario de potencial es el del primer equipo, el que más jugadoras aporta a la selección nacional absoluta donde se dan cita habitualmente Belén de Uña, Anita Luján, Vane Sotelo, Irene Samper e Isa García. Y otro tanto ocurre con los combinados autonómicos (sub-21, sub-17 y sub-13), que citan a tres alfareras en cada convocatoria, el máximo permitido por club.

Su presupuesto ronda los 140.000 euros y el dinero público apenas cubre el 20 opr ciento del total

Uno de los secretos de la progresiva consolidación del Alcorcón FSF tiene que ver con el apartado financiero. El presupuesto para la presente campaña ronda los 140.000 euros y el dinero que aportan los organismos públicos (Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Alcorcón) ni siquiera alcanza el 20 por ciento, lo que obliga al propio club a buscar fuentes de autogestión para cubrir el 80 por ciento restante.

Los responsables del club siempre han sido capaces de estar al día de pago gracias a la obtención de recursos alternativos que les permiten cuadrar las cuentas ejercicio tras ejercicio y cerrar incluso con ligeros superavits que se destinan a mejorar las infraestructuras de la entidad. “Además de las cuotas”, explica Alfonso Catalina, “organizamos diversas actividades para captar recursos en las que participan no solo los familiares de las jugadores sino también numerosos vecinos y entre las que cabe destacar la caseta que montamos durante las fiestas patronales o la venta de lotería de Navidad, sin olvidar el apoyo de patrocinadores como House&Credit que nos esponsoriza esta temporada”.

Lejos de plantearse soltar el timón después de más de veinte años de presidencia Alfonso Catalina dice seguir teniendo “ganas e ilusión, aunque es cierto que me caso este año y no sé si podré dedicarle tanto tiempo”. En cualquier caso, lo que no oculta el dirigente del club alfarero y de la Asociación de Clubes de Fútbol Sala Femenino (ACFSF) es que “si en su día alguien me llega a decir que íbamos a lograr lo que hemos logrado en todos estos años le hubiera tomado por loco”.