Alcaraz besa la copa de campeón de Wimbledon (foto: Wimbledon)

Por si faltaba alguna muestra más de que el futuro del tenis responde al nombre de Carlos Alcaraz ahí está el torneo más prestigioso del mundo para corroborarlo. El tenista murciano se coronó este domingo en Wimbledon y lo hizo nada menos que ante Novak Djokovic, ganador de las cuatro últimas ediciones del certamen londinense.

Su triunfo frente al serbio no podía llegar de otra manera más que a través de un partido épico para terminar de redondear su hazaña, un duelo plagado de alternativas tanto en el dominio del juego como en el marcador, e incluso en las emociones del exigente público que se dio cita en la Central y que vibró con el superlativo espectáculo que tuvo ante sus ojos.

Arrancó mejor Djokovic, mucho más avezado en estas lides y que superó el punto de break que dispuso el murciano en el primer juego para imponer su demoledor repertorio de golpes ganadores. El 1-6 final ilustró la superioridad de ‘Nole’.

Poco a poco, sin embargo, Alcaraz fue encontrando su ritmo y conforme se desgranaban los juegos iba descubriendo la manera de contrarrestar las virtudes de su oponente. La segunda manga se fue al tie-break y ahí los pronósticos favorecían indiscutiblemente al serbio, que había ganado los seis disputados a lo largo del torneo. Sin embargo, Carlos supo aferrarse a sus opciones con uñas y dientes y se adjudicó el set (7-6) entre el delirio de los espectadores, ávidos de que el duelo se dilatase lo más posible.

El murciano había encontrado una brecha en su rival y cargó sobre ella en la tercera manga con un aluvión de recursos que desarbolaron a un Djokovic que por momentos parecía fuera de sí y que acabó sucumbiendo por 6-1. Pero el serbio no es de los que se desmoronan así como así, y menos en las grandes citas, así que en el cuarto set recuperó sus señas de identidad para imponerse por 3-6 y dejarlo todo para el quinto y definitivo parcial.

Parecía claro que el saque iba a resultar crucial para conocer al vencedor del torneo y cuando Alcaraz rompió el servicio de Djokovic en el cuarto juego desequilibró definitivamente la balanza. A partir de ahí impuso con autoridad su saque y ni siquiera en el definitivo décimo juego acusó la presión del escenario. Servía para ganar y no le temblaron las piernas para establecer el 6-4 que le coronaba en Wimbledon y reafirmaba su papel sucesorio en el orden del tenis mundial.

Se trata del sexto título de la temporada para Carlos, que acumula un balance de 47 triunfos y 4 derrotas en un curso verdaderamente espectacular. Su triunfo en Wimbledon, además, le permite no solo mantenerse al frente de la clasificación del circuito sino ampliar incluso su diferencia sobre Djokovic.

TERCER GANADOR MÁS JOVEN

Con su triunfo ante Djokovic, Carlos Alcaraz se convierte en el tercer ganador más joven  sobre la hierba de Wimbledon solo superado por Boris Becker y Bjorn Borg. El alemán tiene el récord con su triunfo en la edición de 1985 (17 años, 6 meses y 18 días), batiendo el anterior registro del sueco, que se impuso en la de 1976 con tan solo 20 años y 26 días.

Por detrás de ellos se ha colocado en el palmarés el tenista murciano, que este pasado domingo conquistó el torneo más prestigioso del mundo a la edad de 20 años y 72 días.

Con su triunfo, Carlos se incorpora por derecho propio al exclusivo club que conforman Manuel Santana, Rafa Nadal, Conchita Martínez y Garbiñe Muguruza, los únicos españoles que se habían proclamado con anterioridad campeones en Wimbledon.

«ES UN SUEÑO HECHO REALIDAD»

Al término de la final, Alcaraz trataba de dominar sus emociones, si bien admitía que lo que acababa de conseguir sobre la hierba londinense «es un sueño hecho realidad para mí, es increíble ganar, pero aunque hubiera perdido estaría muy orgulloso de mí por hacer historia en este torneo».

No ocultaba el murciano que el partido arrancó torcido para sus intereses. «Después del primer set pensé, ‘Carlos, tienes que subir el nivel’. Cualquiera podría estar decepcionado después de ese inicio», confesaba.

Instantes antes, Djokovic le había elogiado abiertamente tras caer derrotado ante él en la final y Carlos también tuvo palabras muy positivas hacia el serbio: «Qué puedo decir de él, ya ganaba trofeos cuando yo era un niño y sigue en una forma increíble. Dice que los 36 son los nuevos 26 y lo hace realidad sobre la pista».