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El Pleno de Arroyomolinos rechazó este jueves adherirse al Ayuntamiento de Móstoles en solicitar a la Comunidad de Madrid la ampliación de la Línea 10 de Metro, tal y como pedían dos concejalas no adscritas junto al PSOE local.

Para los proponentes, Arroyomolinos cuenta con una «escasa, costosa y deficitaria red de transporte público», con «únicamente» cinco líneas de autobús, que comunican la localidad con la vecina Móstoles y la capital. Y una solución pasaría por llevar la L-10 hasta el municipio, toda vez que «la Comunidad de Madrid ha abandonado las obras de ampliación del tren de Móstoles a Navalcarnero», sostenían los socialistas.

Sin embargo, los grupos políticos que conforman el Gobierno municipal rechazaron la propuesta, al entender que se trata en estos momentos de un imposible. Además incidieron en que ha de ser el Gobierno de España quien asuma los gastos de no haberse ejecutado el tren entre Móstoles y Navalcarnero.

Ante esta manifestación, el PSOE de Arroyomolinos ha arremetido contra el PP, al que ha calificado de «un grupo de ladrones al que solo le importa quedarse con los fondos públicos invertidos hace años en esta obra y sea ahora el Gobierno quien pague los platos rotos».