La población latina en Madrid supera ya el millón
Madrid alcanza un nuevo hito demográfico: más de un millón de sus habitantes son latinoamericanos, lo que representa uno de cada siete residentes en la capital
Según el último Censo Anual de Población publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), España cerró el año 2023 con 48.619.695 habitantes, tras un incremento de 534.334 personas.
Este crecimiento, impulsado en gran medida por la población extranjera, marca un récord histórico al alcanzar los 6,5 millones de residentes internacionales, que ya constituyen el 13,4% del total de habitantes en el país.
Latinoamérica lidera el crecimiento migratorio
Entre las nacionalidades con mayor aumento destacan los colombianos, que sumaron 124.566 nuevos residentes en 2023, seguidos por los peruanos (47.598) y venezolanos (47.095).
Estas cifras consolidan a Colombia como el tercer colectivo extranjero más numeroso en España, con 587.477 residentes, y destacan un crecimiento relativo significativo de los peruanos (+27,7%) y los colombianos (+27,4%).
Madrid, que lideró el crecimiento poblacional entre las comunidades autónomas con 137.365 nuevos habitantes, ha absorbido gran parte de esta llegada de latinoamericanos. Esta tendencia ha contribuido no solo al aumento de la población, sino también a una mayor diversidad cultural, palpable en todos los rincones de la ciudad.
Un país en transformación demográfica
Mientras la población extranjera impulsa el crecimiento en ciudades como Madrid, España enfrenta un marcado envejecimiento demográfico. El 20,4% de los habitantes tiene 65 años o más, una cifra que sigue aumentando y que plantea desafíos en términos de sostenibilidad y tasa de dependencia, que ya se sitúa en 0,31.
Por el contrario, el número de menores de 16 años disminuyó en 79.965 personas (-1,1%), mientras que el grupo en edad activa (16 a 64 años) creció un 1,2%. Este contraste pone de relieve la importancia de la inmigración como motor del crecimiento poblacional y económico en España.
De este modo, la creciente presencia de latinoamericanos en Madrid no solo refleja cambios en los patrones migratorios, sino que también subraya el papel de la ciudad como un punto de encuentro entre culturas. Esta diversidad se traduce en un enriquecimiento cultural que define la identidad madrileña del siglo XXI.