El CF Fuenlabrada sigue pagando su irregularidad y no acaba de abrir brecha con la zona de descenso

Quedan diez jornadas para la conclusión de la fase regular de Primera RFEF y el CF Fuenlabrada tiene todavía mucho trabajo por delante para certificar su continuidad una temporada más en la categoría de bronce del fútbol español. Oportunidades ha tenido, sobre todo desde la llegada de Diego Nogales al banquillo, para abrir una brecha casi definitiva con las cinco últimas posiciones, pero por unas cosas o por otras la realidad es que su distancia a día de hoy con la zona de descenso es de tan solo tres puntos quedando nada menos que 30 por disputar.

El gran problema en este tramo de competición es que el buen juego que viene desplegando no se corresponde con una concatenación de triunfos. Consiguió encadenar dos a principios de febrero frente a Antequera (3-4) y Yeclano (2-1) que parecían abrir una vía hacia la tranquilidad definitiva, pero desde entonces solo ha firmado una victoria más en cinco compromisos, lo que ha vuelto a complicar su situación, que en cualquier caso no es ni mucho menos dramática.

Este pasado fin de semana afrontaba la visita al Real Murcia con el objetivo de refrendar el 3-0 que le había endosado en la jornada anterior al Algeciras, y lo cierto es que su nivel de juego volvió a ser notable, pero le penalizó enormemente su desempeño en ambas áreas. Encajó pronto el 1-0 por medio de Flakus y a partir de ahí dispuso de numerosas ocasiones tanto en el primer acto como en el segundo, especialmente clara una de Moyano a pase de Bilal, pero no fue capaz de acertar con el gol y Del Real le dio la puntilla ya en el tramo final con el 2-0 definitivo.