El Getafe pudo con el Betis gracias a un solitario gol de Alderete a veinte minutos del final y salió airoso de un escenario tremendamente complicado. Tres puntos de enorme valor que le permiten encarar las dos últimas jornadas fuera de los puestos de descenso
Y eso que el arranque resultó desolador para los de Bordalás. Apenas habían transcurrido cinco minutos cuando a Unal se le iba la rodilla derecha en un apoyo y poco después tenía que abandonar el terreno de juego, quién sabe si para lo que resta de temporada.
El lugar del turco lo ocupó Latasa y lo cierto es que el colectivo azulón supo sobreponerse a tan tempranero mazazo. Apenas generó peligro, salvo quizá en una acción de Mata que desbarató Pezzela, pero supo cómo encapsular a los verdiblancos, reducidos a la mínima expresión durante el primer acto y que apenas inquietaron a Soria desde lejos en un par de golpeos de Canales y Ruibal.
Como era de esperar, la mejoría local tras el descanso fue notable y tanto Juanmi como Ayoze, éste por dos veces, dilapidaron claras ocasiones delante de Soria. Les faltó el acierto que sí tuvo Alderete en el 68’, cuando conectó un espléndido testarazo a la salida de un córner pàra superar a Bravo y decantar el duelo del lado de un Getafe colosal en tareas defensivas y beneficiado en el tramo final del duelo por la expulsión de Pezzella.
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