Moraleja de Enmedio es uno de los municipios más endeudados de España y tras el gobierno de la socialista Valle Luna, la situación no ha mejorado. Sí lo han hecho los responsables municipales. Ahora hay nuevo Ejecutivo, dirigido por la popular Arantxa Godino, que ya avanzó antes de las elecciones de que se estaría en condiciones de bajar impuestos.

Para ello se necesita un nuevo plan de sostenibilidad financiera, en el que ya se han puesto a trabajar y dar los primeros pasos, tras reunirse hace una semana la alcaldesa con el viceconsejero de Presidencia y Administración Local de la Comunidad de Madrid, José Antonio Sánchez. Encuentro que contó con la presencia de los alcaldes de Batres y Arroyomolinos.

Del Gobierno regional también dependerá el futuro visto bueno a un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), otro de los compromisos electorales de la actual regidora.

Mientras tanto, en Moraleja de Enmedio continúa el Plan de Ajuste aprobado por el anterior equipo socialista, por el que se regulan tasas municipales y precios públicos, por ejemplo, como el de las actividades culturales y deportivas, que han generado malestar recientemente entre los vecinos. El actual Gobierno de PP y VOX, pues, ha responsabilizado de esto a sus predecesores, quienes se han defendido alegando que la aprobación definitiva la ha hecho el Ejecutivo de Godino.