La Comunidad de Madrid invertirá cerca de 430.000 para adquirir e instalar un total de 8.826 mamparas y biombos, para separar a los alumnos en los centros educativos y evitar la transmisión de Covid-19.

Estos nuevos elementos se suman a las otras 8.137 mamparas que ya había comprado el Ejecutivo madrileño para la vuelta a las clases en septiembre y que ya están distribuidas donde eran necesarias, según ha detallado el vicepresidente, Ignacio Aguado.

De esta manera, los colegios e institutos de la región dispondrán de 5.014 mamparas de comedor, 3.255 mamparas individuales para los pupitres y 557 biombos.

Las individuales tienen unas medidas de 60 centímetros x 60 centímetros, lo que garantiza la protección del alumno frente a sus compañeros dentro del aula. Son de fácil instalación, y se han ubicado en aquellas clases de centros educativos en los que no hay espacios alternativos. Las mamparas de los comedores son elementos con otras características, ya que sirven para separar el espacio entre cuatro alumnos en los puestos de comedor escolar.

En cuanto a los biombos, tienen una dimensión de 1 metro x 1,8 metro de ancho, y son de policarbonato traslucido. Estos componentes sirven para compartimentar espacios de un modo sencillo y dotar de flexibilidad espacio en los centros educativos.

56 AULAS PREFABRICADAS MÁS

Por otra parte, el Consejo de Gobierno también ha aprobado la compra de 56 nuevas aulas prefabricadas que supondrán una inversión de 5,1 millones de euros. Estos módulos se suman a los 190 que ya había adquirido el Ejecutivo autonómico, con lo que en total serán 246 los prefabricados instalados en los 63 centros educativos que presentaban la necesidad de generación de espacios adicionales.

Se trata de aulas que, según el Ejecutivo autonómico, «permiten que los grupos estables de convivencia no tengan contacto entre sí, algo muy útil para prevenir los contagios por el virus».

Las aulas disponen de salida directa a los patios de los centros, ventilación natural, y aislamiento térmico y acústico, y cuando es necesario disponen de un aseo adosado. Estas construcciones tienen la misma vida útil que las convencionales, se instalan de una forma rápida y limpia, pueden adaptarse a las necesidades de los centros según las circunstancias y cumplen con todos los estándares técnicos.