El nuevo Gobierno que hoy comienza la XV Legislatura de la democracia es el más numeroso y el más caro de la historia reciente de España.
Un solo personaje, Félix Bolaños, triministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Justicia; tiene ahora mismo a su cargo a 613 asesores, 13 en el Ministerio de Justicia y el resto en el de Presidencia. Y de los altos cargos, Bolaños es el jefe de 53 de los 414 que hay en el Ejecutivo.
El número de asesores del Gobierno ha experimentado un constante crecimiento desde que Sánchez alcanzar el poder en 2018, en concreto un 28%. Durante la última legislatura bajo el liderazgo de Pedro Sánchez, se incrementó en un 39%, alcanzando un total de 1.151 asesores de libre designación, en contraste con los 828 que existían al cierre de 2019.
En cuanto al número de altos cargos, en la última legislatura ha aumentado en un 33%, hasta los 336. Esto convierte al gobierno de Sánchez en el que más altos cargos y asesores de libre designación ha acumulado en toda la historia democrática, sumando un total de 1.487.
Así, el costo de los asesores se ha elevado de 49,6 millones en 2019 a 70,6, un 46% más. Si se incluyen los altos cargos, el gasto total ha pasado de 121,6 a 146,9 millones, un aumento del 21,4%.
La explicación a todo este despropósito nos la da el profesor de Derecho Constitucional y vocal de la Comisión de Expertos del Ministerio de Administraciones Públicas, Rafael Jiménez Asensio, en blog ‘La mirada institucional’, en una entrada dedicar a analizar el nuevo Ejecutivo de Sánchez:
UNA ESTRUCTURA ELEFANTIÁSICA
“Se trata de un Gobierno de coalición, pero no de dos partidos, sino del segundo partido en escaños en el Congreso con la cuarta fuerza política que está conformada por un adosado de partidos con un equilibrio aún inestable, y con una fuerza política con acomodo complejo. Este dato ha impregnado, sin duda, el reparto de Ministerios (teñido con algunos vetos) y ha hecho necesaria la multiplicación estructural de departamentos, esto es, de los panes y los peces, para dar acogida a (casi) todas las fuerzas políticas que en la coalición apoyan al Gobierno, y resituar algunos descolgados”.
Es decir, una estructura elefantiásica, difícil de coordinar, desmesuradamente cara, y que solo responde a la necesidad de Sánchez de contentar a unos y a otros.
Y toda calamidad le ocurre a España y a los españoles en medio de una crisis que nos ha convertido en el cuarto país de la Unión Europea, junto con Letonia, con el porcentaje de población en riesgo de pobreza y exclusión más elevado, según el informe ‘El Estado de Pobreza en España. Seguimiento de los indicadores de la Agenda UE 2030. 2015-2022’, elaborado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES).
