BookCrossing es la práctica de dejar libros en lugares públicos para que los recojan otros lectores, que después harán lo mismo. Ya sea en un parque, una cafetería o una Escuela de Adultos, como en el caso del CEPA Paulo Freire de Fuenlabrada, convertido en el mayor punto de intercambio de libros de la Comunidad de Madrid.

Hace dos años que se sumaron a este proyecto internacional, como explica a Al Cabo de la Calle el ideólogo de la iniciativa, Antonio Díez, profesor en el Paulo Freire. “Muchos alumnos tienen libros en casa se quieren deshacer de ellos y empezamos a tener muchas donaciones, pero teníamos espacio limitado. La directora me comunicó si quería hacerme cargo del proyecto, habilitándonos un espacio, y entonces nos sumamos al BookCrossing. La sorpresa que me llevé es que ningún sitio de la Comunidad de Madrid tiene tantos libros”, reconoce.

No es solo una forma de ‘reciclar’ los libros, sino de aproximar a la lectura a cientos de personas. En el caso de Fuenlabrada, además, sirve de oportunidad para acercarse a la conocida escuela de adultos, pues cualquier vecino, sin necesidad de estar matriculado, puede donar sus libros o recoger cualquier otro ejemplar que desee leer en horario de apertura del centro.

Una cadena de lectura imparable en la ciudad, referente en el intercambio de libros gracias al CEPA Paulo Freire, que ya figura como uno de los imprescindibles en el proyecto BookCrossing.