Foto: Getafe Cf

El campeonato liguero acaba de echar el cierre y en el Getafe huele a cambio de época. O a fin de ciclo, como se le prefiera denominar. La etapa de José Bordalás al frente del banquillo azulón ha coincidido con un lustro dorado para el club azulón, que no solo conquistó su segundo ascenso a la máxima categoría, sino que se ha mantenido en ella cuatro campañas, entre las que cabe destacar otra participación continental e incluso un intenso coqueteo con la Champions League.

Pero como en cualquier relación que se precie, el desgaste ha acabado haciendo mella y todo el mundo da por hecho que Bordalás ocupará la próxima campaña otro banquillo, siendo el de Mestalla el que más tiempo lleva sonando. «Vamos a intentar desconectar, descansar y no sabemos lo que nos deparará el futuro inmediato», comentaba en tono enigmático el preparador levantino a la conclusión del partido de Granada, si bien emplazaba a una pronta resolución del asunto. «Vamos a ver qué ocurre en los próximos días; todo se despejará en breve», indicaba.

Y si hace ya tiempo que se da por segura la salida de Bordalás, parece lógico pensar que Ángel Torres cuenta ya en su agenda con un abanico de candidatos para reemplazarle. Los primeros nombres en salir a la palestra han sido los de Pacheta, Mendilibar, Quique Sánchez Flores o Diego Martínez, pero surgirán más. Seguro. Desde el club azulón, en cualquier caso, guardan mutismo a la espera de que se resuelva primero la salida del actual inquilino, ya que conviene recordar que tiene un año más de contrato y seguramente Torres tratará de sacar alguna contraprestación a su destinatario final.

La previsible salida del promotor principal de este quinquenio dorado coincidirá además con la marcha de muchos de los protagonistas sobre el terreno de juego. En ese sentido, cabe citar a los jugadores que acaban contrato (Yáñez, Etxeita, Portillo, Nyom y Ángel), además de los cedidos que regresan a sus clubes de origen (Aleñá, Kubo, Cucho Hernández, Poveda y Chakla) y que en su inmensa mayoría no continuarán en Getafe.

Por otro lado, son varios los jugadores con contrato que a buen seguro contarán con pretendientes este verano y posiblemente alguno de ellos haga también las maletas. En ese grupo figurarían los Djené, Cucurella, Arambarri, Maksimovic, Olivera, etc. Así que, entre unas cosas y otras, todo aboca a una profunda reestructuración del plantel de cara al próximo curso.

UN CURSO CON LUCES Y SOMBRAS

Por lo que respecta al curso que acaba de concluir, quizá haya habido más sombras que luces, pero como recordaba Bordalás «llevábamos tres temporadas tan buenas que perdimos un poco la noción de la realidad. Cuando pase un poco de tiempo nos daremos cuenta de lo difícil que es lo que ha hecho el equipo».

La permanencia en la máxima categoría, la fiabilidad defensiva (séptimo mejor equipo en ese apartado) o la aparición en escena del canterano Juan Iglesias, que ha logrado afianzarse en el primer equipo, han sido posiblemente las noticias más destacadas de la temporada.

En el lado contrario, lo peor con diferencia han sido los irresolubles problemas del equipo de cara al gol. 28 tantos en 38 jornadas, de las que hasta en 21 ocasiones se ha quedado sin marcar, han convertido al equipo azulón en el peor en este apartado de la competición. Y por supuesto, para un equipo como el ‘Geta’, no haber podido disfrutar su hinchada en las gradas ha sido el otro gran escollo.