Candelaria Testa politiza a la Policía anunciando que denominará “Alfredo Pérez Rubalcaba” al Centro de Seguridad de Alcorcón 

La alcaldesa de Alcorcón, Candelaria Testa, vuelve a tensionar el panorama municipal con el reciente anuncio del cambio de denominación del actual Centro Unificado de Seguridad (CUS) por el del socialista Alfredo Pérez Rubalcaba. Así, mientras la Policía Local de Alcorcón está trabajando con total desamparo ante la falta de atención y de dotación de medios por parte del Ayuntamiento, la regidora se ocupa y se preocupa por el nombre del centro de seguridad.  

Y es que aprovechando el Acto Homenaje en conmemoración del bicentenario de la Policía Nacional el próximo 7 de marzo, la alcaldesa de Alcorcón pretende cambiar la denominación de estas dependencias municipales policiales por la del político socialista, «lo que refleja una clara falta de respeto hacia los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y hacia propios ciudadanos» denuncia el Partido Popular de Alcorcón, Roberto Marín Vergara. 

En palabras de Marín Vergara: “esta acción es un intento descarado de politizar una institución fundamentalmente apolítica. La decisión de la alcaldesa de imponer el nombre de un político socialista en un centro de seguridad como el nuestro, enfrenta a los vecinos y politiza un cuerpo tan respetable como es la Policía Nacional.”  

«Y es que esta no es la primera vez que desde gobiernos socialistas se politizan estamentos o dependencias que deberían mantenerse al margen de la política» recuerdan los populares. En noviembre del 2022, el PSOE de Madrid utilizó la institución de la Policía Nacional para organizar un acto político en su sede. Un acto liderado por la ex alcaldesa Natalia de Andrés y el ministro Marlaska. 

Otro controvertido cambio de nombre fue el del Centro Cultural Miguel Ángel Blanco, en honor al concejal asesinado cruelmente por la banda terrorista ETA en 1997, que fue sustituido por el del “Centro del títere” una ofensa hacia la memoria histórica violenta más reciente y una falta de respeto como la que quieren cometer el próximo día 7 en Alcorcón. “Que retiren el nombre de Miguel Ángel Blanco por el del Centro del Títere y que ahora nuestro CUS quieran “bautizarlo” Alfredo Pérez Rubalcaba es una muestra más, pero mayor, de la politización partidista y maniqueísta de la vida pública de Alcorcón” 

Esta decisión choca de plano con la idea de mantener a todas las fuerzas y cuerpos de seguridad Municipales y del Estado ajenas a cualquier tipo de politización por parte de las autoridades tanto municipales como estatales. Una decisión polémica, que generará controversia, dentro de unas instituciones con un total carácter imparcial y apolítica. 

Por su parte, el grupo municipal Vox Alcorcón también ha criticado duramente la decisión de la alcaldesa. Así, su portavoz, Pedro Moreno, señalaba a través de sus redes sociales: Llevan el sectarismo en vena. No pueden reprimirse. Politizan todo. Así no”. 

El edificio del que la alcaldesa socialista ha anunciado su cambio de nombre cobija todas las unidades de seguridad de Alcorcón (Policía Municipal, Nacional, Bomberos y Protección Civil). Con una superficie de 13.000 metros cuadrados, en su interior se encuentran la oficina de denuncias, las dependencias del DNI, pasaportes y las diversas unidades operativas (información, policía científica, extranjería…), la oficina de atención al ciudadano y de atestados de la Policía Municipal, un salón de actos, un museo, los servicios administrativos, sus jefaturas, las dependencias de la Concejalía de Seguridad, y la sala de control de tráfico. Todos los servicios de protección ciudadana y de administración en una sola dependencia. 

El portavoz de los populares, añade que: “la alcaldesa debería preocuparse por reforzar los medios humanos y técnicos a la policía local y cuerpo de bomberos en vez de crispar a la ciudadanía con estas decisiones”. 

En este sentido, desde el periódico Al Cabo de la calle venimos denunciando la precaria situación en la que cumplen acto de servicio los agentes de Policía Local de Alcorcón, carentes de los medios adecuados y suficientes para el desempeño de sus funciones. Así, el Ayuntamiento de Alcorcón no está dotando de chalecos de protección antibalas a los agentes de nuevo ingreso, tal como establece la legislación vigente. Por lo que los agentes se juegan la vida, teniendo que utilizar chalecos caducados prestados por otros compañeros o sufragarse uno nuevo, ellos mismos. 

Además, el concejal de Seguridad, al que deben dirigirse por escrito y a través de los sindicatos policiales ya que no atiende a sus propios agentes locales, se niega a dotarles con dispositivos TASER alegando que es “por convicción política”, cuando el Ayuntamiento dispone de estos dispositivos y los agentes con la formación adecuada para su utilización. Todo ello, a pesar del incremento de la violencia en la localidad, principalmente por causa de bandas latinas, que son muy agresivas y utilizan armas que entrañan grave riesgo para la vida de los agentes, como machetes de gran tamaño.