(fotos: @CorredorEcoSur)

Llega el verano, altas temperaturas y el riesgo de incendio que, en el caso de Las Presillas (Alcorcón) se potencia por la falta de mantenimiento de este pulmón verde. Ramas secas, restos de podas y otros materiales inflamables, como plásticos, son el ‘perfecto’ caldo de cultivo para que suceda lo de todos los veranos: los temidos incendios.

De hecho, durante el pasado 2022, se llegaron a registrar hasta cinco fuegos, solo en Las Presillas, que obligaron a emplearse a fondo a Bomberos de Alcorcón y de la Comunidad de Madrid. De ahí que ahora, con el inicio de la temporada estival, las organizaciones ecologistas hayan vuelto a llamar la atención sobre una mayor protección del entorno, en plena ola de calor iniciada el fin de semana y que, según la Agencia Estatal de Meteorología, se prolonga, al menos, hasta el jueves, con máximas entre 38 y 39 grados.

Un problema que no es único y exclusivo de Alcorcón, sino también del Ayuntamiento de Madrid y del propio Gobierno de España. Concretamente, la situación es aún más preocupante, si cabe, en el Pinar de San José, próximo a la M-40 y en terrenos de competencia del Ministerio de Defensa. En este caso, alertan que desde Filomena siguen las ramas secas y árboles caídos, exigiendo la inmediata intervención.

VERTIDO HISTÓRICO JUNTO A LA VÍA MILITAR ABANDONADA

Estos días, también, los ecologistas han vuelto a poner el foco en el vertido “histórico” de plásticos, junto a la vía militar abandonada. Concretamente, en la zona de Cuatro Vientos, próximo al cuartel de Transmisiones, en el término municipal de Madrid y muy próximo a Las Presillas.

Este vertido data de más de diez años, en una zona donde los ecologistas llevan otros tantos años pidiendo que se habilite una vía verde entre Leganés, Alcorcón y Madrid. Eso sí, empezando por la retirada de una vez por todas estos plásticos.