El Museo de Arte en Vidrio de Alcorcón (MAVA) ofrece las exposiciones del escultor Mario Valdés: El Bosque Secreto, Delicias geométricas y Symmetrías, desde el lunes 10 de enero hasta el 20 de febrero. Más de 200 piezas conforman estas tres muestras, distintas pero complementarias, que ocupan la sala de exposiciones temporal y la sala de pequeño formato del museo.

La exposición más importante y que ocupa la sala temporal, ‘El Bosque Secreto’, es un conjunto de once esculturas, tres instalaciones escultóricas y una videoinstalación que versan en su conjunto sobre la percepción de la realidad y su relación con la situación de emergencia climática que padecemos actualmente.

Las once esculturas que conforman la misma están realizadas en fragmentos de vigas de madera dentro de las cuales se integran imágenes de vegetación sobre vidrio plano y vidrio espejo Reflectasol que cuentan con títulos tan sugerentes como ‘El Señor de los Bosques’, ‘La Casa del Bosque’, ‘Manantial’, Gran árbol’… En clara referencia a la vegetación que habita un bosque.

En la muestra de vidrio se pueden visionar tres instalaciones escultóricas. La primera de ellas está compuesta por 26 esculturas construidas con 26 troncos de árbol quemados, 52 piezas de vidrio espejo Reflectasol, 26 imágenes de vegetación sobre piezas de vidrio, hojas secas y una instalación sonora reproduce ambientes de la naturaleza (trinos, viento, tormenta, lluvia…).

La segunda instalación llamada ‘El Bosque secreto 2’ recrea una imagen panorámica, aparentemente desordenada, de un frondoso y verde hayedo de 15 metros de largo por 2 metros de altura.

La muestra se inaugura el 10 de enero y podrá visitarse hasta el 20 de febrero

La instalación ‘El Bosque Secreto’ es un lugar del Alma, es una curiosa balsa de agua que simula un estanque, construido con una estructura de madera que alberga 500 litros de agua y donde flotan una serie de nenúfares y está habitada por un único pez: El alma.

La videoinstalación ‘Vigilia y Sueño’ se sitúa el torreón de Los Castillo, y dispone de dos urnas de vidrio con un ‘picoproyector’ en que se ve la vida nocturna de los insectos, habitantes de una charca.

La exposición continua en la segunda planta del Museo de Vidrio, en la sala Pequeño Formato recientemente inaugurada y se puede visionar la muestra ‘Delicias geométricas’, una colección de 36 esculturas de pequeño y mediano tamaño realizadas con vidrio plano y láminas acrílicas translúcidas de color. Su objetivo buscar la interacción de la luz con las superficies, está compuesta por dos series: ‘Homenaje al cubo’ y ‘Desplegando el cubo’.

Y para completar el recorrido nos encontramos con ‘Symmetrias neoplatónicas 2021’, una colección de 8 esculturas de mediano y gran tamaño realizadas con vidrio plano, láminas acrílicas translucidas de color y vidrio laminar de color.