El estreno de Mehdi Nafti al frente del banquillo del Leganés tras la destitución de Garitano no incluyó una revolución en toda regla. Más que nada porque apenas había dispuesto de dos días para preparar el partido de este martes ante el Cartagena. Sus únicas decisiones de calado tuvieron que ver con el cambio en la portería al apostar por la experiencia de Asier Riesgo en detrimento de Iván Villar, así como la titularidad en la punta de ataque de Juan Muñoz, que dejó en el banquillo a Randjelovic. La tercera y última novedad fue Rodri Tarín en lugar de Sergio González, aunque en este caso se debió a la sanción del segundo.

El partido acabó en tablas (1-1), por lo que el conjunto pepinero encadenó su séptimo compromiso consecutivo sin ganar, lo que le deja con 11 puntos sumados después de 14 jornadas. Las sensaciones fueron mejores en la primera mitad, en la que el ‘Lega’ no solo logró sobreponerse al tanto inicial de Ortuño (11’) sino que devolvió las tablas al marcador gracias a un cabezazo de Fede Vico (23’) e incluso pudo ponerse por delante.

Tras el descanso, sin embargo, las fuerzas empezaron a flaquear y el partido pudo caer de cualquiera de los dos lados, ya que si bien los locales dispusieron de un par de ocasiones claras, el Cartagena vio como le eran anulados dos goles por fuera de juego.

DEMASIADO VULNERABLE EN LAS ÁREAS

Lo que parece claro, en cualquier caso, es que Nafti tiene trabajo por delante, y mucho, para sacar al Leganés del atolladero en el que anda metido. Y es que, al margen del empeño y la buena actitud mostrada en varios tramos del duelo frente al Cartagena, la realidad es que sigue siendo demasiado vulnerable en las áreas, es decir, le hacen goles con demasiada facilidad y a su vez le cuesta hacerlos una barbaridad, tal y como volvió a ponerse de manifiesto.

El nuevo técnico parece tenerlo asumido y por eso a la conclusión del encuentro afirmaba que “el equipo puede mejorar, pero eso necesita su tiempo y lo iremos trabajando. El talento está, y eso es lo más complicado de conseguir en una plantilla, así que quiero pensar que con el tiempo y la vuelta de los jugadores tocados, el equipo irá a más”, confió.

Nafti enfatizó que en los pocos días que lleva al frente del colectivo leganense “me he encontrado a unos chicos receptivos, con ganas de revertir la situación, con compromiso, y que me han ayudado mucho en el vestuario”, destacó antes de enviar un mensaje a la hinchada pepinera, “que emocionalmente está sufriendo mucho y necesitamos curar sus heridas con compromiso y buen juego”, apuntó.