No pudo encontrar mejor camino el CD Leganés para ‘amarrar’ virtualmente la permanencia que arrollando de manera literal a un Betis que para cuando quiso dar señales de vida en Butarque ya había recibido dos goles, el primero a través de un penalti convertido por Szymanowski (7′) y el segundo tras una espléndida acción personal de El Zhar (14′).

Lejos de guarecerse en su confortable renta tras el descanso, los de Garitano perseveraron en su afán de no dejar el más mínimo resquicio para la remontada verdiblanca y Gabriel Pires, mediado el segundo acto, fabricó apenas rebasado el centro del campo uno de los mejores goles de la presente temporada. Ya con el rival completamente noqueado y las gradas en pleno éxtasis llegó el cuarto, segundo en la cuenta de Szymanowski, para cerrar una histórica noche de lunes que deja prácticamente sentenciada la continuidad del equipo pepinero un año más en la máxima categoría del fútbol español.

Y es que le basta un punto en las dos últimas jornadas (visita al Athletic de Bilbao y recibe al Alavés) para certificar la permanencia de manera matemática. O que el Sporting de Gijón no gane los seis puntos en juego (visita al Eibar y recibe al Betis). Solo una hecatombe de siderales dimensiones impediría, pues, que el ‘Lega’ siga siendo de Primera por más que en el vestuario se siga apelando a la cautela.

Así, a la conclusión del encuentro Garitano admitía que «era fundamental sacar estos tres puntos y ya solo nos queda uno para el objetivo», si bien recalcaba que «no hay nada hecho porque nos quedan dos rivales muy complicados todavía».

Por su parte el bigoleador de la noche, Alexander Szymanowski, coincidía con el técnico en que «este día era vital. Era el partido más importante en la historia del Leganés y lo hemos solventado. Se ha reconocido el trabajo que venimos haciendo todo el año», apuntaba, «pero la realidad es que aunque hemos dado un paso muy importante todavía hay que seguir peleando».