La pasada semana, el Banco Central Europeo anunció su decisión de poner fin a la compra de deuda a partir de julio de este año. Una medida que perjudicará a los países de la zona euro más endeudados, como España.

Y es que nuestro país arrastra una losa en forma de deuda de 120% del PIB y el anuncio coincide con un Gobierno de 22 ministros y un presidente que está dilapidando dinero público como nunca antes.

Las consecuencias, está claro, las pagaremos los ciudadanos. De hecho, ya lo estamos notando en la cesta de la compra y los precios de la energía. Lo peor está por llegar. Cuanto antes se asuma y se ponga fin a este Gobierno, mejor nos irá.