La paradoja se ha instalado en Pinto y amenaza con quedarse a perpetuidad. Al menos mientras alguien no le ponga remedio. La Real Academia (RAE) define a la paradoja como un “dicho o hecho que parece contrario a la lógica”, además de ser un recurso literario. Y en cuestiones como la seguridad, la ciudad es de las más paradójicas que podemos encontrar en el entorno.

Remontémonos al año 2008. Con una población de 42.445 personas, Pinto cuenta con una plantilla de Policía Local de 94 agentes. Más de una década después, en el año 2021, los habitantes de Pinto ascienden a 53.537 personas, pero la plantilla de agentes se reduce a 70. Y no lo decimos nosotros, sino un informe de la propia Policía Local, que aborda como la ratio de policía por cada mil habitantes era en 2008 de 2,21, mientras en 2021 era de 1,3, lo que supone una reducción del 40% en la ratio policía/población.

Un documento demoledor, que haría avergonzar a cualquiera que tuviera una pizca de amor propio. Desde el concejal de Seguridad, o mejor dicho, concejales que han pasado por este área; al mismísimo alcalde. Porque esta merma de agentes que vigilan las calles tiene como víctimas a los propios policías, de un lado, que además cuentan con unos materiales muy deficientes, por no decir lamentables (chalecos caducados, mediante); pero por otro lado, a los propios vecinos, que tienen que ver como en cada estadística que publica el Ministerio del Interior, Pinto ocupa los primeros puestos de inseguridad. Por no mencionar que la integridad física de unos y otros está en peligro.

En el año 2008, Pinto tenía una población de 42.445 personas y 94 policías locales, mientras en 2021 los habitantes subieron a 53.537 y la Policía mermó hasta los 70 agentes. Una reducción de la ratio que debería avergonzar a más de uno

Es más, en el primer semestre de 2022, la delincuencia en Pinto se situaba por encima de la media regional y nacional, con una tasa de delito por habitante muy superior a la de los municipios del entorno. Ahora se entiende por qué. Un 40% menos de policías entre 2008 y 2021, que se dice pronto.

En 2023 se incorporarán nueve agentes, que servirán para cubrir las jubilaciones previstas. Un parche. Y a ellos solo podemos desearles mucha suerte y que Dios les pille confesados, porque con estas circunstancias el trabajo se presenta harto complicado.

Para más inri, en los Presupuestos Generales del Estado para el año que viene, el PP había introducido una enmienda para que Pinto contará, al menos, con una Oficina del DNI gestionada por Policía Nacional. Tampoco sería la panacea, es verdad, pero serviría para descongestionar la labor administrativa de los agentes. Sin embargo el PSOE lo rechazó, junto a sus socios de Gobierno (Bildu, entre ellos).

Alguien en Pinto debe mirar más allá de la Comunidad y pedir responsabilidad, si de verdad le preocupan sus vecinos. Y ese alguien es usted, al menos hoy, señor alcalde.