Ha tenido que aguardar a los últimos instantes de la penúltima jornada para certificar la permanencia, pero la espera ha merecido la pena. El Getafe mantendrá su plaza la próxima temporada en la máxima categoría del fútbol español y lo ha conseguido sin tener que depender de otros resultados, sino sumando los tres puntos de su duelo ante el Levante.
Como no podía ser de otra manera en una temporada tan complicada para sus intereses, el triunfo azulón ha tenido que aguardar casi al último suspiro para concretarse. El empate no le valía teniendo en cuenta la remontada del Elche en Cádiz y ha tenido que ser Kubo, que había saltado a la cancha a un cuarto de hora del final, quien sentenciara el duelo con un excelente disparo desde la frontal que ha superado a Cárdenas y se ha traducido en la salvación matemática independientemente de lo que ocurra en la última jornada.
La realidad hasta ese momento es que la trascendencia del encuentro se notaba en la puesta en escena del Getafe, intenso como siempre y volcado sobre la meta visitante. Aunque el primer escarceo ha sido visitante, en una acción desbaratada por Djene de manera providencial, la réplica ha corrido por cuenta de Ángel, que ha caído en el área visitante en pugna con Malsa tras adelantarse el jugador levantinista al golpeo del tinerfeño.
Los de Bordalás no cejaban en su empeño y apenas dos minutos después (11′) Cucurella robaba un balón y se internaba hasta el lateral del área para poner un centro atrás que aprovechaba Aleñá para rematar con enorme solvencia y abrir el marcador.
El partido se ponía de cara para los locales a las primeras de cambio, pero quedaba mucha tela que cortar y el Levante no estaba por la labor de bajar los brazos. De hecho, a la media hora de juego llegaba el empate en un balón colgado por De Frutos que Melero golpeaba desde la frontal superando a Soria.
Tocaba volver a empezar y poco después Mata, que había entrado en sustitución del lesionado Ángel, enviaba al larguero un centro de Olivera desde la izquierda (38′).
UN TRIPLE CAMBIO QUE RESULTÓ DECISIVO
El descanso llegaba sin más sobresaltos y a vuelta de pausa el colectivo azulón metía una marcha más en pos del segundo tanto, pero su insistencia no encontraba premio y los minutos se iban consumiendo. A un cuarto de hora del final, Bordalás echaba mano de Cucho, Iglesias y Kubo, cuya entrada en escena resultaría fundamental para la suerte del choque.
En pleno atasco, y cuando ya corría el minuto 85′, el japonés ha dibujado una jugada personal rubricada con un disparo seco desde el borde del área que ha superado a Cárdenas y se ha convertido en el 2-1, un marcador que ya no se movería pese a la expulsión de Timor y a los postreros intentos del Levante y que acabaría dando al Getafe su continuidad un año más en Primera.
Quizá el premio no esté a la altura de los cosechados en las últimas campañas, en las que no ha estado decididamente involucrado en la pelea continental, pero con la perspectiva del tiempo seguro que se valorará en su justa medida lo que supone mantenerse un año más en una competición de tanto calibre.
