Foto: ACB Photo/E. Cobos

La primera derrota del curso para el Montakit Fuenlabrada llegó en casa ante Unicaja (79-93), pero los fuenlabreños volvieron a ofrecer una notable imagen pese a no poder contar ni con Marc García no con Eyenga y pelearon el duelo hasta el último instante para acabar cediendo por un resultado excesivamente abultado para lo que se vio sobre la cancha del Fernando Martín.

De hecho la igualdad y las alternancias en el marcador fueron una constante hasta el descanso, al que se llegó con 42-45 para los malagueños. El Fuenla llegó a disponer en un par de ocasiones de cinco puntos de ventaja, la última con 31-26, pero la creciente superioridad visitante en el rebote y su elevado acierto en el lanzamiento exterior le permitieron tomar el mando en el marcador de una manera cada vez más nítida.

Jaime Fernández (28 puntos con un sublime 8/11 en triples) se convirtió en una auténtica pesadilla para los de Agustí Julbe, que al término del tercer cuarto cedían por 58-67 y daban sensación de estar casi noqueados. Sin embargo, una fulgurante puesta en escena en el último cuarto liderada por Rupnik y Llorca se tradujo en un 8-0 de parcial que estrechó al máximo el marcador (66-67) y disparó la incertidumbre acerca del desenlace final.

El suspense, no obstante, duro lo que tardó Unicaja en recuperar su descomunal eficacia en el lanzamiento exterior y tres triples casi consecutivos -dos de Salin y uno de Carlos Suárez– abrieron una brecha en el marcador que ya sí le fue imposible de contrarrestar al Fuenla.

Álex Llorca (9 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias) y Pako Cruz (12 puntos, 3 rebotes y 5 asistencias) fueron los más valorados en el bando fuenlabreño, aunque el gran protagonista fue Lucas Nogueira, que se estrenó en el segundo cuarto y aunque su aportación fuer limitada (4 puntos y 2 rebotes) dejó detalles de lo mucho que puede aportar al equipo en cuanto vaya entrando en dinámica.