Muere el Papa Francisco a los 88 años
«Con profundo dolor debo anunciar la muerte de nuestro Santo Padre Francisco. A las 7:35 horas de la mañana el obispo de Roma ha retornado a la Casa del Padre». Con estas palabras anunciaba el cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrel, el fallecimiento del Papa Francisco en su residencia de la Casa Santa Marta. Su cuerpo reposará en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, por la que Jorge Mario Bergoglio sentía especial devoción, y no en las grutas del Vaticano. La causa de la muerte, según ha confirmado el Vaticano, ha sido un ictus al que siguió una crisis cardiaca y respiratoria irreversible.
Su situación médica había empeorado en los últimos tiempos. Ingresado desde el pasado viernes 14 de febrero llevaba semanas en el hospital Gemelli de Roma. El Vaticano ya había informado previamente de que sufría una bronquitis que derivó en «una infección polimicrobiana del tracto respiratorio» y posteriormente se complicó en una neumonía bilateral. Por ello, tuvo que cancelar su agenda y seguir recibiendo cuidados en la clínica.
Su última aparición pública fue el 20 de abril, Domingo de Resurrección, cuando impartió la bendición Urbi et Orbi desde la Plaza de San Pedro, visiblemente debilitado. Todos los cargos públicos del Vaticano cesan con la muerte del Papa y es el cardenal Farrell, en su condición de camarlengo, quien se encargará de manera interina de la administración de la sede católica.
En la sede de la Nunciatura Apostólica, en la calle Pío XII de Madrid, se abrirá mañana a la 9:30 horas un ‘libro de condolencias’ que estará al alcance de todos los fieles que deseen compartir su pésame por el fallecimiento del pontífice hasta el viernes 25 de abril.
Dolor de la diócesis
La diócesis de Getafe se ha unido al dolor de todos los católicos y ha manifestado una profunda gratitud por su legado. El obispo, Ginés García Beltrán, en un mensaje a todos los fieles, ha señalado que, «con la esperanza en Cristo Crucificado y Resucitado, ora en sufragio por nuestro querido Papa Francisco, que ha sido llamado a la Casa del Padre. A su vez, damos gracias al Señor por su entrega generosa en el ejercicio del ministerio petrino, durante estos doce años».
«Invocamos la protección y consuelo maternal de la Santísima Virgen María, Madre de la Iglesia y Madre de la Esperanza, sobre todo el Pueblo de Dios; así como su intercesión por el alma del difunto Pontífice», ha expresado García Beltrán.
Las parroquias de la diócesis han convocado a los fieles a la oración por el eterno descanso de su alma y en agradecimiento por su entrega al servicio de Dios y de la humanidad. Es el caso de la parroquia de Jesús y San Martín en Getafe, o la de Santa María la Blanca de Alcorcón que dedicarán el rezo del Santo Rosario.