Foto: UEFA Europa League

Pocas derrotas, por no decir ninguna, habrán tenido a lo largo de su historia un sabor tan dulce para el Getafe como la de este jueves en el Johan Cruyff Arena. La tropa de Bordalás ha caído por 2-1 ante el Ajax, pero los holandeses se han quedado muy lejos de soñar siquiera con remontar el 2-0 de la ida en el Coliseum.

De hecho, lo más justo es que el colectivo azulón hubiera firmado al menos un empate porque se ha dejado hasta tres remates en la madera, pero seguramente los den por bien empleados teniendo en cuenta que ya está en octavos de final.

De salida Bordalás no se ha andado con experimentos y ha alineado el mismo once que tan buenas sensaciones dejó hace una semana. Y su apuesta le ha producido réditos de inmediato porque a los cinco minutos Mata aprovechaba un pase al área de Deyverson para superar a Onana y firmar el 0-1, que echaba un monumental jarro de agua fría a la caldera ‘ajacied’.

Poco ha tardado, sin embargo el Ajax en restablecer la igualada, ya que en el diez Danilo pescaba en el segundo palo una perfecta asistencia de Van de Beek y establecía la igualada. Se presumían, lógicamente, minutos de agobio para el área de Soria, pero el Getafe ha sabido cortocircuitar a su oponente en todo momento. Y no solo eso, sino que en un partido sobrado de tensión ha tenido agallas suficientes para no colgarse de su larguero.

Todo lo contrario, ya que en el tramo final del primer acto se ha dejado dos remates en la madera que podían haber dejado finiquitado el asunto antes del descanso. Primero Mata de cabeza a la salida de un corner (36′) y muy poco después Deyverson, que ha empalado al poste un servicio de Nyom, se han quedado a escasos centímetros de su objetivo.

A vuelta de pausa se esperaba un Ajax mandón, pero ha vuelto a verse contrarrestado en todas las facetas del juego por el descomunal esfuerzo de jugadores como Arambarri o Masimovic, que han debido hacer más kilómetros que el Transiberiano. Aun así, a los de Ten Hag les sobra talento para dar y regalar y no iban a entregar las armas sin ofrecer batalla.

Tadic ha avisado con un remate de cabeza ligeramente alto (59′) y en el 63′ Olivera, en su intento por despejar un centro de Elting, ha marcado en propia puerta. Quedaba media hora, tiempo más que de sobra para que el Ajax volviera a soñar con la remontada en voz alta, pero el Getafe no se ha permitido ninguna licencia más hasta el pitido final.

Y no solo eso sino que ha dispuesto de otro remate a la madera, esta vez de Maksimovic (71′) y de otra grandísima ocasión de Mata (85′), al que le han faltado fuerzas para superar a la defensa rival cuando Onana estaba lejos de su arco.

Y así, con el Getafe jugando más tiempo en campo del Ajax que al contrario, se ha consumido otro duelo digno de figurar en la historia del club azulón, que ya tiene otra eliminatoria europea de la que presumir por los siglos de los siglos.

Algún día se recordará que Bordalás, Djené, Arambarri, Mata, Molina y compañía dieron buena cuenta de un Ajax que venía de ser semifinalista de la Champions. Casi nada al aparato, oiga. Y con más de 2.500 azulones en las gradas del Johan Cruyff Arena. Definitivamente, en Getafe se ha instalado el estado de felicidad.