Del 1 de febrero al 1 de marzo Griñón ha tenido restricciones a la movilidad. Solo en la última semana de febrero, del 20 al 28 de este mes, la Policía Local ha interpuesto 41 denuncias por incumplimiento de las medidas impuestas durante el cierre perimetral.

Así, según datos facilitados por el alcalde de Griñón, José María Porras, el fin de semana del 20 y 21 de febrero, los agentes interpusieron 15 denuncias por botellón, no llevar mascarilla y entrar en zona con restricción.

Ya el viernes 26, los policías realizaron dos denuncias por deambular por vía pública en horario prohibido, otras tres denuncias por botellón y seis más por incumplimiento de las restricciones de entrada en Griñón.

El sábado 27, solo una denuncia fue por no llevar mascarillas; otras 12 más por entrar de forma ilícita al municipio y dos más por saltarse el toque de queda. En total, pues, 41 sanciones.

«Las instrucciones que he trasladado a la Jefatura de Policía es incrementar el control y vigilancia de toda la normativa, principalmente sanitaria y la relacionada con el consumo de alcohol en vía pública», ha dicho Porras, que ha agradecido a los agentes su trabajo.

INSPECCIONES EN LOCALES

Durante este tiempo, la Policía Local de Griñón ha llevado a cabo labores de vigilancia en establecimientos del municipio. En algunos casos se han impuesto multas por cuestiones de aforo y están pendiente de procedimiento sancionador.

El alcalde de Griñón ha explicado también que las intervenciones  han sido más minuciosas en paradas de autobuses. «Vamos a ser inflexibles con ciertas conductas. La mejor forma de evitar sanciones es no cometer infracciones», ha apuntado el edil, que ha sentenciado que «sin seguridad no hay libertad».