El pasado viernes, 13 de octubre, concluía el plazo para que el Ayuntamiento de Leganés presentara el recurso de casación ante el Tribunal Supremo, continuando, así, en el proceso que investiga la gestión en las residencias de mayores durante la pandemia de COVID-19.

En agosto de este año, el Tribunal Supremo admitió el recurso del Ayuntamiento contra la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), sobre esta investigación. Y ahora el Consistorio debía decidir si continuaba en el procedimiento.

El Pleno de Leganés de septiembre aprobó una moción en este sentido y el alcalde, el popular Miguel Ángel Recuenco, dijo que haría lo que los letrados municipales estimasen oportuno. Fuentes del Ejecutivo consultadas por Al Cabo de la Calle, decían que el regidor «no va a intervenir ni un ápice en la decisión que tome el jefe de la Asesoría Jurídica del Ayuntamiento», lo que «implica no interferir sobre este asunto».

Ante la falta de información, este lunes, la portavoz de Podemos, Alba Pulido, se aventuraba a decir que «el Ayuntamiento no presentó el recurso», sin aportar ninguna prueba ni habiéndolo confirmado.

Y ya este martes, la portavoz del PSOE, Laura Oliva, seguía los cauces legalmente establecidos, solicitando por Registro del Ayuntamiento una copia del recurso, en caso de que este se hubiese presentado en tiempo y forma. «Necesitamos saber si el Ayuntamiento lo ha interpuesto. Las familias necesitan respuestas. Luchan por la memoria de sus mayores», expresaba Oliva, acompañada del secretario general del PSOE-M, Juan Lobato.

MANIFESTACIÓN DE FAMILIARES

Todo ello después de que la semana pasada, la Marea de Residencias, compuesta por profesionales sanitarios y familiares de mayores fallecidos, se manifestara en el Ayuntamiento, pidiendo la continuidad en e proceso judicial. Además, intentaron entrar al Pleno extraordinario que se celebraba, pero se les denegó el acceso.

Sobre este punto, Recuenco pedía disculpas porque la Marea hubiese tenido esa «sensación», alegando que «lo que se ha hecho es facilitarles la acreditación y la entrada al Salón de Plenos de forma ordenada y de uno en uno», desmintiendo, pues, que no se les permitiese la entrada.

Sin embargo, fuentes del PSOE de Leganés desmentían a su vez al alcalde, afirmando que se llegó a avisar a la Policía para impedir que los familiares pudieran entrar.