Néstor García

Curtido en mil lides y con una trayectoria forjada hasta en siete países (Argentina, Puerto Rico, Venezuela, Uruguay, Qatar, México y Brasil) el argentino Néstor ‘Che’ García (Bahía Blanca, 1965) emprende ahora su primera aventura europea al frente del Montakit Fuenlabrada. El estreno del nuevo proyecto fuenlabreño tendrá lugar este sábado en el Fernando Martín a las 19.30 horas y con el Bilbao Basket como invitado. Al término de la sesión de entrenamiento de este lunes, el exresponsable de la selección venezolana atendía a Al Cabo de la Calle y dejaba entrever buena parte de su ideario, ése que piensa implantar en un colectivo diseñado a su imagen y semejanza

Se acabaron las probaturas y por fin llega lo bueno.
Sí, ahora llega lo lindo. Uno ha elegido esta carrera para eso. Estamos bien, con muchas ganas de empezar y además jugamos en casa. El equipo es nuevo y hay que conocer cada vez más las combinaciones, pero estoy muy contento con mi staff y con todos los jugadores. Más allá de que la dirigencia haya intentado que sea más rápida mi adaptación, igual han ido comprando también la idea de lo que yo pretendo como entrenador

¿Como llega el equipo a este arranque de competición?
Nos falta todavía. El equipo ha trabajado bien y sé que vamos a estar a la altura de lo que hemos trabajado. Pero esto es como una planta, por más que la riegues 15 veces al día no va a crecer más en tres días. El tema es seguir identificando bien las ideas que queremos como idea principal, no salirnos de ese plan y seguir mejorando en los detalles.

¿Tiene en el plantel todo lo que buscaba o echa algo en falta?
Cuando en la primera reunión con el club tuve el informe de los jugadores que tenían contrato ví que lo que había me gustaba. Y luego teníamos que traer jugadores que mejoraran el despliegue físico del equipo y que defensivamente dieran un salto de calidad. Creo que se han elegido muy bien las contrataciones y siento que el equipo ahora tiene bastante versatilidad.

¿Se conforma con la permanencia?
Bueno, ése es el objetivo del club, pero uno siempre quiere más y trabaja para más. Hay que ir paso a paso. El objetivo del club es salvar la categoría y nosotros queremos llegar hasta donde la competición nos lleve. El baloncesto es un deporte bastante lógico, se juega con las manos y se disputan 34 partidos. Al final la competencia pone a cada uno en su lugar y nosotros lo que queremos es crecer.

¿Cuales serían las señas de identidad que le gustaría que arraigasen en este equipo?
Defensivamente quiero que sea un equipo intenso, que tenga deseo, que sienta lo que es defender. Tenemos un equipo parejo y todo el mundo puede dar lo máximo. Y luego en ataque que cada uno tenga su rol según sus características: Sabemos quién puede tirar más y quién puede coordinar más. La idea es de mucha movilidad. Les veo muy bien a los jugadores y estoy muy contento.

Usted es un entrenador pasional y seguro que si algo no le falta al nuevo Montakit Fuenlabrada será carácter.
Espero que no le falte. Yo vivo mucho este deporte porque lo amo y cada partido para mí es un placer por más que las cosas a veces no salgan. Cuando uno es competitivo es porque no tiene miedo ni a perder ni a ganar y sí la tranquilidad de que uno da todo. Sí, este equipo va a ser muy pasional porque ya lo es y porque es una marca de este equipo y la gente lo pide.

Su curriculum es muy extenso, pero no sé si este desafío es el más apasionante de su carrera.
Yo tenía muchas ganas de venir aquí. Hace años tuve unas tres oportunidades que por equis causas no se dieron. Ahora cuando me llamaron cambié todo mi plan de vida para venir aquí porque tenía muchas ganas. Conozco a José Quintana desde hace 20 años y para mí es gratificante más allá de un deseo el hecho de que hayan creído en mi y que haya sido yo la opción. Hay muchas ganas de los dos lados y yo les daré lo mejor.

¿Qué es lo que más le ha sorprendido de lo que se ha encontrado?
El nivel de logística en cuanto a detalles. Hay mucha gente trabajando. La Liga Endesa es la mejor Iiga del mundo FIBA por la cantidad de detalles que se manejan, organizativamente hablando, para que todo salga a la perfección.

La primera piedra en el camino será este sábado el Bilbao Basket, ¿qué espera del estreno?
Lo mejor, el equipo posiblemente estará un poco ansioso por el debut porque somos muchos los que debutamos, pero con muchas ganas y siempre siguiendo nuestra idea. Estamos convencidos de que estamos construyendo algo y mientras nos mantengamos en esa idea siempre vamos a estar dentro del eje.

Seguro que habrá oído hablar muchas veces de la magia que desprende el Fernando Martín cuando entra en ebullición. ¿hasta qué punto cree que el factor cancha será un clave a lo largo de la temporada?
Lo de la afición será importantísimo para nosotros. Por mi manera de vivir y dirigir esto sé que cuando la gente se identifica apoya y empuja y cuando uno recibe el apoyo eso le hace dar el extra. Hay algo que no se compra en el supermercado, que es lo que se lleva dentro y si eso te lo provocan, mucho mejor.

No hay más que echar un vistazo a los entrenamientos para ver el buen ambiente que se respira en el plantel. ¿es usted de los técnicos que apuesta por una especie de ‘buen rollo’ con los jugadores o de los que marcan distancias?
Yo doy por entendidas las cosas a través del sentido común porque ya somos adultos y todos llevamos mucho tiempo en esto y hemos tenido una educación. El sentido común es el que lo ubica todo. Yo estoy aquí por este equipo y he dejado todas mis cosas para estar aquí. Sería ilógico que no esté cerca de la gente por la que vine. Por otro lado, las relaciones duran por el respeto. Cuando se acaba el respeto se acaba cualquier cosa. Todo lo marca el sentido común y hay que manejarse dependiendo del momento

¿Qué mensaje enviaría a esa afición que sueña con una temporada ilusionante?
El mensaje es que los quiero ver. Yo ya tengo referencias y he visto vídeos de cuánto aman y le dan a su equipo. No veo el momento de que llegue el sábado para que estemos todos juntos. Se que me van a ayudar muchísimo y van a hacer muy feliz mi estadía acá.