Chalet de la calle Neptuno, 72 (Foto.- Google Maps)

La Asociación de Usuarios y Consumidores de Valdemoro (ACUSVAL) se ha dirigido a la Fiscalía Especial Contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada para que investigue el chalé de la calle Neptuno, 72 y las actividades que se realizan en su interior. Esa casa funciona desde hace años como prostíbulo y viene siendo denunciada desde hace años por los vecinos de la zona, quienes aseguran que allí también se trafica con droga.

En un escrito presentado en el registro de la Fiscalía, ACUSVAL aporta documentación basada en testimonios de vecinos e informaciones de prensa y solicita que se investigue si se están cometiendo delitos de explotación sexual, detención ilegal o contra la salud pública; y que derive las consecuencias a los inquilinos y a la propiedad del chalet.

Se trata de una casa funciona las 24 horas del día, lo cual deriva en continuas molestias a los vecinos, de día y de noche, y se producen incidentes graves como el ocurrido la noche del pasado viernes.

Unos hechos que se produjeron cuando, en torno a las nueve y media de la noche, dos individuos entraron en el chalé esgrimiendo sendas pistolas simuladas con la intención de robar a los presentes.

Según han informado varios vecinos a Al Cabo de la Calle, las mujeres, junto a algunos clientes, huyeron por la parte trasera y buscaron refugio en las casas de las inmediaciones. La situación provocó las lógicas escenas de pánico entre los vecinos, en su mayoría familias y muchas de ellas con hijos menores, que ahora están aterrados después de las escenas de violencia vividas.

En concreto, el vecino del chalé contiguo se encontró con varias de estas mujeres que habían entrado en el patio de la casa y llamaban a la ventana del salón pidiendo refugio. El vecino llamó a la Guardia Civil y hasta el lugar se desplazaron varias dotaciones, aunque, a su llegada, los dos individuos ya habían huido.

Pero no es la primera vez que se producen graves incidencias y molestias en el barrio. Otra vecina señalaba a Al Cabo de la Calle que tiene que aguantar la presencia en la puerta de su casa de hombres que se equivocan de dirección e insisten en entrar.

Anuncio del chalé en una web de contactos

HASTA ALTAS HORAS DE LA MADRUGADA
El trasiego de clientes es continuo, afirma esta vecina, aunque lo peor se produce por la noche, y especialmente los fines de semana, cuando pasan coches con la música muy alta, gritos y peleas hasta altas horas de la madrugada.

Respecto a las mujeres que habitan en la casa, todas ellas de origen asiático, los vecinos han asistido a escenas de violencia por parte de los ‘guardianes’ del chalé, también asiáticos, que podrían demostrar que están siendo forzadas a ejercer la prostitución

Y no es solo la prostitución. Según aseguran los vecinos, todo indica que en el interior del chalé se trafica con drogas ya que es habitual ver personas que entran en el chalé y salen a los pocos minutos.

El vecindario ha protagonizado protestas y caceroladas en la puerta del chalé y han denunciado reiteradamente la situación a las autoridades. Ahora encuentran el apoyo de ACUSVAL, cuyo presidente, Jesús Paniagua, señala a Al Cabo de la Calle que “aunque las molestias que sufren los vecinos son importantes, no deben apartar el foco de la esclavitud que sufren las mujeres prostituidas en ese chalet”.