PARQUE LISBOA 2

Los vecinos de Parque Lisboa se hartan del “incivismo”. Día sí y día también, los parques y jardines de este característico barrio de Alcorcón amanecen llenos de residuos. Latas de cerveza, litronas, vidrios rotos, bolsas de basura o restos de otras deposiciones se almacenan a diario, pese a los esfuerzos de los servicios de limpieza, que según relatan los vecinos todas las noches hacen acto de presencia para intentar lavar la imagen del barrio.

“Siempre ocurre igual; día tras día, en la pequeña dehesa situada frente al centro médico”, se queja amargamente un vecino de Parque Lisboa. Este tipo de situaciones, por desgracia, son habituales en las grandes ciudades del sur de Madrid. Pero en verano el problema toma más envergadura ya que con el buen tiempo, la gente sale a la calle a disfrutar de sus zonas verdes. Especialmente los más pequeños, ahora que el curso ha finalizado.

PARQUE LISBOA

Así, para los vecinos del barrio, la acumulación de estos desperdicios “supone un riesgo, ya que justamente al lado de este pequeño parque hay una guardería infantil en el que todas las tardes los niños salen y se reúnen para jugar y divertirse”. En este sentido, alertan de que los menores pueden cortarse con los restos de vidrio que se pueden ver en la zona.

Por ello piden medidas urgentes al Ayuntamiento de Alcorcón. Más en concreto, gran parte de los vecinos se han quejado de que la Policía Municipal “cose” a multas indiscriminadas cuando “aparcas un momento en doble fila en las inmediaciones, pero no hace nada cuando alguien deja sus restos de basura en este y otros parques”. De este modo, exigen al Gobierno local que ponga el foco en medidas coercitivas contra “todo aquel que tenga una conducta incívica y se dedique a contaminar las vías urbanas y los espacios naturales”.

El problema en Parque Lisboa, lamentablemente, se extiende estos días a otros barrios, donde se pueden ver los contenedores a rebosar. Obviamente, la ordenanza municipal de limpieza y recogida de residuos prohíbe depositar basura en la vía publica, con multas, dependiendo de su gravedad, de 100 euros la más leve hasta 3.000 euros si la infracción es muy grave. En el caso de no recoger los excrementos caninos, que también son un problema en Parque Lisboa y las aceras de otras barriadas, la multa es de 200 euros.

En 2016, el Ayuntamiento de Alcorcón recaudó por sanciones medioambientales más de 46.000 euros. En total, los servicios municipales del Consistorio abrieron 407 expedientes a vecinos de Alcorcón por comportamientos incívicos, los mismos hábitos que a día de hoy se siguen produciendo -y desgraciadamente se producirán- en muchos barrios de la ciudad como Parque Lisboa. Este ha sido el primero en dar la voz de alarma. Ahora le corresponde al Ayuntamiento poner las soluciones dentro de su competencia.