Sábado 18 de mayo a las 16.15. Ahí se localizan el día ‘D’ y la hora ‘H’ de un Getafe que se juega en 90 minutos la posibilidad de clasificarse para disputar la próxima edición de la Champions League por vez primera en su historia. Ahí es nada. Cierto es que el camino para lograrlo se presenta harto complicado tras su derrota en el Camp Nou porque las tornas han cambiado y ya no depende de sí mismo, pero cuenta con dos opciones que no piensa desdeñar por nada del mundo.

La primera consiste en ganar al Villarreal en el Coliseum y que el Valencia no haga lo propio en su visita al Valladolid en Zorrilla. La segunda, mucho más rocambolesca, pasaría por empatar ante el conjunto villarrealense, que el Valencia ceda en Pucela y el Sevilla no gane al Athletic de Bilbao en el Sánchez Pizjuán.

En el bando getafense saben lo que hay y el propio Bordalás admite que “hay que apelar al Valladolid-Valencia”. Pese a que al conjunto blanquiavioleta le va poco en el envite una vez garantizada la permanencia, el técnico azulón está convencido de su integridad. “No tengo ninguna duda de la profesionalidad y honradez del entrenador del Valladolid y de sus jugadores y sé que harán un partido para ganar”, subrayaba, “al igual que nosotros tendremos que ganar también” a un Villarreal que también está ya matemáticamente salvado.

PROMOCIÓN ESPECIAL

Consciente de la trascendencia de la cita, el club puso en marcha a principios de semana en marcha una promoción especial con el objetivo de llenar el Coliseum. Consiste en que cada abonado puede adquirir una entrada a precio reducido, concretamente 10 euros en fondos y lateral, y 20 euros en tribuna baja y cubierta. Además, el Villarreal renunció a las localidades que le correspondían en un fondo, por lo que salieron también a la venta.

A nivel deportivo, el cuerpo técnico recupera para esta última jornada tanto a Bruno González como a Jaime Mata, ausentes el pasado fin de semana por sanción. Por contra, pierde a Djené por idéntico motivo.

Aunque el objetivo indisimulado es conquistar una plaza en la Champions, los responsables del club pretenden que el estadio sea una fiesta pase lo que pase, ya que el equipo tiene asegurada su presencia en competición continental por tercera vez en su historia.