La Asociación de Afectados de las 147 viviendas de la ya ‘famosa’ promoción de El Rosón vuelven a cargar contra la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda (EMSV) y el Ayuntamiento. Seis años después de que arrancase el proyecto siguen sin recibir sus viviendas y aseguran que el vaso de su paciencia ha acabado una vez más por desbordarse. La enésima.

«No es que sean incapaces de terminar la promoción ni de dar una fecha concreta, ni de incontables cosas más, es que ni siquiera son capaces de contestar un correo y poner fecha para que la Asociación pueda reunirse con el Ayuntamiento y la EMSV, tal y como se comprometieron a hacer todos los meses», recuerdan los afectados.

«¿Dónde está esa transparencia de la que tanto hablan?, dónde está ese compromiso y esa buena forma de trabajar?, ¿cómo trabaja esta empresa pública que tanto defiende el concejal?, ¿estarán retrasándolo todo por algún fin concreto?», son preguntas que trasladan desde la Plataforma sin encontrar respuesta.

«Una vez más juegan con la falta de información, la necesidad y la desesperación de los adjudicatarios y no están siendo claros ni transparentes»

El último desencuentro tiene que ver con el acuerdo alcanzado en septiembre pasado, según el cual habría reuniones periódicas entre las partes, al menos una vez al mes, para ir recibiendo información acerca del estado de la obra, pasos a seguir y entrega de las viviendas, pero indican que desde el pasado 4 de febrero no han vuelto a reunirse a nivel colectivo pese a haberlo solicitado por escrito hasta en siete ocasiones que no han obtenido respuesta. «Una vez más juegan con la falta de información, la necesidad y la desesperación de los adjudicatarios y no están siendo claros ni transparentes», insisten.

LA LETRA PEQUEÑA DEL ‘GESTO COMERCIAL’

Los adjudicatarios sospechan que tras esta actitud de la EMSV y el Ayuntamiento estaría el denominado ‘gesto comercial’ que se les trasladó en la última reunión a través del cual «se responsabilizarían de sus gestiones», algo que en principio fue bien recibido por los afectados ya que se ahorrarían cierta cantidad de dinero en determinados trámites, si bien luego se percataron de que había ‘letra pequeña’ y para ahorrarse estos gastos tendrían que firmar antes un contrato ‘envenenado’.

Y es que según explican, “la aceptación de la oferta comercial supone exclusivamente la renuncia del adjudicatario a cualquier acción judicial o extrajudicial o cualquier tipo de reclamación contra la EMSV u otros agentes de la edificación por retrasos en la entrega de la vivienda por hechos ocurridos con anterioridad a la firma de este documento, o de aquellos otros que en el futuro puedan tener relación con nuevos retrasos que tengan su causa en la pandemia por la COVID 19 o en circunstancias imposibles de prever en estos momentos», lo que ha supuesto para los afectados «otra decepción, puesto que este gesto es claramente una maniobra beneficiosa para EMSV pero no para los adjudicatarios».

Es por eso que entre este ‘gesto comercial’ con condiciones, los sucesivos retrasos, los compromisos inclumplidos, las dudas acerca del cumplimiento de la memoria de calidades o el hecho de que la obra esté desatendida fuera de horario laboral, la Asociación de Afectados considera que existen argumentos suficientes como para pedir la dimisión del gerente de la EMSV.

UN CARRUSEL DE DESPROPÓSITOS

Desde que a finales de 2015 arrancó este proyecto de viviendas de obra pública en Getafe, los adjudicatorios se han visto afectados por un auténtico aluvión de despropósitos por parte de la promotora (EMSV), a la que responsabilizan de una concatenación de errores que ha provocado que lleven seis años esperando por una vivienda que a día de hoy todavía no saben a ciencia cierta cuándo les será entregada, además de que nadie les aporta información fiable acerca de su construcción y su correspondiente entrega.

Es por eso que recientemente se trasladaron a todos los grupos con representación en el Ayuntamiento para hacerles llegar una vez más la interminable relación de problemas a la  que han tenido que hacer frente durante este tipo y solicitar su colaboración en el Pleno municipal para desbloquear la situación.

Conviene recordar que los adjudicatarios de las viviendas han llevado a cabo diversas movilizaciones durante los últimos años tanto en las inmediaciones de la edificación como en la sede del Ayuntamiento

Entre esos problemas que achacan «a la poca seriedad y compromiso por parte de la empresa promotora», citaban entre otros, «el fallo en la apertura de sobres en la primera licitación; obras paradas durante meses; renuncia de empresas (BECSA, OCA); quiebra de constructoras (OPROLER); terrenos contaminados (puesto que no se debió estudiar bien el terreno previamente); hemos perdido la cuenta de las licitaciones que ha vivido la promoción (a la última solo se presentó una empresa y nos indicaban que había muchas interesadas…); retrasos constantes; falta de transparencia; cambios varios en el proyecto sin avisar a los adjudicatarios; sensación constante de falta de compromiso; variaciones en la calidades, etc».

Conviene recordar que los adjudicatarios de las viviendas han llevado a cabo diversas movilizaciones durante los últimos años tanto en las inmediaciones de la edificación como en la sede del Ayuntamiento, pero las buenas palabras que han ido recibiendo en este tiempo no se han traducido en las soluciones que esperaban y seis años después siguen aguardando por sus viviendas.