La presión de los afectados por las obras de las 147 viviendas de El Rosón parece haber surtido efecto, tras un lustro de retrasos, renuncias y promesas incumplidas. Hace quince días, en Al Cabo de la Calle publicábamos la incertidumbre de estas familias por conocer la nueva constructora después de que en verano desistiera la empresa encargada de los trabajos: Oproler. Pero su via crucis parece estar más cerca de acabar.

Y es que este miércoles, el Ayuntamiento de Getafe ha hecho oficial el nombre de la nueva adjudicataria de las obras de estas viviendas. Será la UTE Abala-Facto-Orthem la que se encargue de finalizar, por 12.207.444,40 euros, las ansiadas viviendas de El Rosón.

Una vez que la Empresa Municipal del Suelo y la Vivivienda (EMSV) de Getafe formalice el contrato con la UTE y se procede al acta de replanteo, ésta tendrá un plazo de 11 meses para ejecutar los trabajos. Algo que ya se ha notificado a las familias.

NO HABRÁ SOBRECOSTE

En una reciente reunión con los afectados, la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, les aseguró que la calidad de los materiales y acabados de la obra no sería negociable y se atendría a las condiciones estipuladas en su día y que tampoco habría ningún tipo de sobrecoste sobre los precios fijados para esta promoción de viviendas.

Además de eso, la alcaldesa confirmó que el Ayuntamiento emprendería acciones legales contra la constructora que se retiró de la obra dejando paralizados los trabajos y que en caso de que hubiera lugar a algún tipo de indemnizaciones por los perjuicios ocasiones éstas recaerían en los afectados.

A pesar de estas promesas, desde el PP de Getafe recordaban esta semana que aún no se había puesto en marcha la oficina de atención personalizada a los afectados de El Rosón. Algo que se aprobó hace dos meses por el Pleno ordinario.