
ALCORCÓN| La parroquia de San Pedro Bautista cumple cincuenta años
La parroquia, regentada por los franciscanos, ha dado vida espiritual y también social al barrio
“La liturgia, la asistencia caritativa, la catequesis, los movimientos apostólicos, tantos niños y jóvenes, familias que se formaban, los enfermos y ancianos. Una verdadera comunidad cristiana que me acogió y acompañó con cariño y cuidado para que en aquellos primeros pasos pudiera afianzarse mi consagración”. Así cuenta su experiencia en la parroquia de San Pedro Bautista Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo, un joven fraile franciscano que juraba sus votos en los setenta del siglo pasado y fue a parar a su primer destino pastoral en Alcorcón.
En abril de 1975, el cardenal Tarancón, arzobispo de Madrid, pidió a varias congregaciones religiosas que se hicieran cargo de las nuevas parroquias que la Iglesia quería abrir en el sur de Madrid. La preocupación pastoral del cardenal Tarancón tenía sentido. La población en el sur de Madrid crecía con familias que se alojaban en esas ‘ciudades dormitorio’ que dependían de la capital, pero comenzaban a formar barrios y comunidades.

A los franciscanos ‘les tocó’ una parroquia nueva que el arzobispado quería abrir en lo que entonces eran los arrabales de Alcorcón. Una zona en la que se edificaban edificios de viviendas que estaban llenos antes de concluir. Un barrio nuevo, rodeado de tierras de labor y huertos, sin equipamientos, eso vino mucho después, pero con tanta vida. La calle principal del barrio se llamaba, y se llama, Virgen de Itziar, y Tarancón pensó que ese era el nombre apropiado para la parroquia.
Pero los franciscanos lo pensaron mejor y decidieron dedicar el templo a su protomártir en Japón, San Pedro Bautista, uno de esos franciscanos que dieron su vida por la fe en Cristo y fueron martirizados en Extremo Oriente. La parroquia, además de su misión espiritual, cumplió esa misión de consolidación social que acompañaba a la Iglesia en aquella época, de manera que fue el primer centro social del nuevo barrio. En la parroquia se organizó el primer centro de mayores, que hoy todavía funciona, y la primera guardería (porque la expresión ‘escuela infantil’ entonces no se usaba), gestionada por las Siervas del Espíritu Santo.
Felicitación de la alcaldesa
La alcaldesa de Alcorcón, Candelaria Testa, felicitaba a la parroquia de San Pedro Bautista en una carta en la que recordaba a los fieles “el papel fundamental que ha protagonizado su institución, las personas que la componen, desempeñando un compromiso esencial en apoyo a los ciudadanos y fortaleciendo el tejido social de nuestra ciudad”. La parroquia, nos cuenta su responsable, el párroco Juan Pedro Ortega, sigue siendo un motor social del barrio, un punto de encuentro y de acogida, ayudando a la gente, sin mirar el origen o la raza o la creencia, “porque en estos 50 años solo nos han importado las personas”, asegura Juan Pedro. Medio siglo de vida espiritual y de amor por el barrio y las personas que lo habitan.

“Cuantísima gracia derramada en estos 50 años”
El domingo 16 de marzo, el obispo de Getafe, Ginés García Beltrán, celebraba la misa que conmemoraba el medio siglo de la parroquia de San Pedro Bautista. “Es un acontecimiento celebrar 50 años de la parroquia, cuantísima gracia derramada a lo largo de estos 50 años, cuantísimos acontecimientos de fe que se han vivido en esta casa, en esta parroquia, desde los sacramentos, la Eucaristía y todos los sacramentos que se viven cada día, la proclamación de la Palabra de Dios en la catequesis, en la predicación, la comunión de la comunidad y también la caridad”, aseguraba el prelado en su homilía. “Muchas veces intentamos hacer cosas raras y buscamos signos extraordinarios para ver a Dios sin darnos cuenta de que Dios está en nuestra humanidad “, concluía.