ayuntamiento de pinto

Rudyard Kipling es uno de los escritores y poetas más ilustres del siglo XIX. Cuando hablamos de Kipling, de entre toda su excelsa obra, destaca una por encima de todas. ‘Capitanes intrépidos’. Novela que fue llevada al cine en 1937 de manera magistral por Victor Fleming, con un descomunal Spencer Tracy de protagonista.

Tracy era Manuel, el marino portugués que daba lecciones de vida al malcriado y caprichoso Harvey. De la mano de Manuel, Harvey llega a entender que la vida es como ese mar bravío que te sacude con sus olas y te amenaza con zozobrar en cualquiera de sus tormentas. Ciclones, huracanes o tempestades que solo los capitanes más intrépidos son capaces de sortear hasta llevar a su nave a buen puerto.

Haciendo un símil, una ciudad es como un barco. Se hace a la mar donde esperan tormentas en forma de deuda, suciedad, inseguridad y una administración lenta, torpe y que agota la paciencia del contribuyente. Hoy estos, fundamentalmente, son los problemas de Pinto tras cuatro años de Gobierno de Rafael Sánchez. Una legislatura que este 15 de junio llega a su fin, afortunadamente. Aunque no los problemas, pues estos esperan a la vuelta de la esquina al nuevo Gobierno que, con total seguridad, liderará Diego Ortiz, pues fue la voluntad de los pinteños darle el mayor número de votos y concejales al PSOE.

Es el momento de devolver a Pinto a una senda de estabilidad, alejando a la ciudad de los vaivenes, los conflictos y las broncas

“Nosotros, si gobernamos, lo primero que haremos será sentarnos a hablar con los trabajadores y ver las necesidades y problemas que tienen en sus departamentos. Tenemos claro que el equipo que tengo la suerte de encabezar sabe qué áreas hay que dinamizar por ello motivaremos a los excelentes trabajadores que tenemos en Pinto”, dijo Ortiz en una entrevista para Al Cabo de la Calle previa a las elecciones de mayo.

Y eso tendrá que hacer desde el minuto uno. Cubrir las necesidades de unos vecinos sobre los que estos años han recaído los problemas generados por Unidas Pinto -antes conocidos como Ganemos- . Ya decía Kipling que “toma problemas prestados, si te lo dicta tu naturaleza, pero no los prestes a tus vecinos”. Y en la naturaleza del PSOE de Pinto, el que representa Ortiz al menos, está tomar esas cuitas heredadas de Rafael Sánchez para resolverlas. No está trasladar esos problemas a los vecinos, para generar bronca y enfrentamiento, como ha hecho el Ejecutivo de Unidas Pinto en esta legislatura.

La pesadilla ha terminado. Es el momento de devolver a Pinto a una senda de estabilidad, alejando a la ciudad de los vaivenes de un alcalde más pendiente de las redes sociales que de las necesidades de sus vecinos. Es el momento de gente intrépida, que trabaje por y para el pueblo. Los pinteños han decidido en las urnas que no quieren más conflictos. Ni con la UTE, ni con los bomberos ni muchos menos entre vecinos. Es el momento de Diego Ortiz y tiene por delante cuatro años para demostrar que la elección del 26 de mayo y de este 15 de junio fue la más acertada.