Hace apenas una semana, el Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid condenaba a la alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés, a cinco años de inhabilitación, por la quiebra de EMGIASA, en la época en la que el socialista Enrique Cascallana estaba al frente de la Alcaldía y De Andrés era una de las administradoras de la mercantil. De hecho el propio Cascallana, otros cinco exconcejales del PSOE y una exedil de IU, eran también inhabilitados por este desastre financiero.

E insistimos que la sentencia aportaba un fundamento demoledor para la administración de la hoy alcaldesa, en cuanto a la gigantesca “inversión” de dinero público en el faraónico CREAA de Alcorcón. Textualmente decía así: “La concursada EMGIASA, por las razones de la titularidad de su accionariado y de los integrantes de sus órganos de gobierno y de administración en cada momento temporal tras las periódicas elecciones municipales, en modo alguno pretendía recuperar para su patrimonio la inversión de dicha liquidez, renunciando a analizar, valorar, estudiar y examinar si podría recuperar los 104.000.000,00 de euros en el plazo de 50 años”.

En ‘román paladino’, jamás quisieron recuperar para los vecinos de Alcorcón aquel dinero que les pertenecía; que los alcorconeros habían puesto al servicio del bien común a base de impuestos, trabajo y sacrificio. Los gestores socialistas de EMGIASA y su hoy (todavía) alcaldesa traicionaron a una ciudad entera y los tribunales así lo han certificado.

Pero De Andrés se aferra al cargo, se agarra a la poltrona y no piensa dimitir, salvada por sus socios de Podemos, que hacen malabares entre la regeneración que prometieron y la degeneración en la que han acabado. Fuera de la política dejarán de mentir, como dice Pablo Iglesias.

La ciudad de Alcorcón es hoy gobernada por una alcaldesa, Natalia de Andrés, condenada por su gestión de bienes públicos en una empresa pública. Dónde quedó el honor, la dignidad y la higiene democrática

En fin, que el espectáculo no puede ser más dantesco. Alcorcón está gobernada por una alcaldesa condenada por su gestión de lo público en una empresa pública. ¿Dónde quedó el honor, la dignidad y la higiene democrática?

Así se lo recordó la oposición este lunes en un Pleno extraordinario. Como elocuentes estuvieron los portavoces de PP, Ciudanos y VOX. Cada uno en su terreno. “¿Dejaríais que un médico inhabilitado os operara a vosotros porque no está la sentencia firme?”, decía la edil del PP, Ana Gómez. La respuesta es evidente.

“No se trata de poner en duda a un Gobierno, sino la legitimación de que este Gobierno siga con Natalia de Andrés al frente”, manifestaba por su parte la portavoz de Ciudadanos, Diana Fuertes.

“Puede recurrir, efectivamente, pero tiene que hacerlo desde su casa, no usando bienes públicos”, remataba el concejal de VOX, Pedro Moreno.

Ni una coma a los tres y todos los reproches a unos concejales de Gobierno, que a toque de corneta, decían estar orgullosos de su alcaldesa inhabilitada, olvidando que ella no es su jefa, sino los vecinos de Alcorcón.